Espaciosa y colorida: así es la casa de Kiko Hernández y Fran Antón en Melilla

Kiko Hernández y Fran Antón durante su luna de miel.
Kiko Hernández y Fran Antón durante su luna de miel.
KIKOHERNANDEZTV / INSTAGRAM
Kiko Hernández y Fran Antón durante su luna de miel.

La historia de amor entre Kiko Hernández y Fran Antón ha sido una de las más vividas este año. Antes de despedir Sálvame, el colaborador hacía pública la relación que mantenía con su compañero de teatro, además de anunciar su boda. Desde entonces, todo ha sido como un cuento de hadas para ambos. Desde el 'sí, quiero' en Melilla hasta su luna de miel.  

Ahora, ya con los nervios un poco más calmados, la pareja ha comenzado a hacer su vida juntos bajo un mismo techo. Aunque no lo hacen solos, ya que junto a ellos se encuentran las dos hijas del televisivo, Abril y Jimena, nacidas en 2017 por gestación subrogada. 

La familia al completo se encuentra más unida que nunca en una casa en Melilla, de la que poco a poco se van conociendo más detalles gracias a sus redes sociales. Y es que en su hogar los colores son los protagonistas, por lo que nadie quiere perderse el interior del nido de amor. 

Y es que, aunque ambos cuentan con una vivienda a las afueras de Madrid de 700 metros cuadrados con siete habitaciones y siete baños, lo cierto es que no dudan en escaparse cada vez que pueden de la capital. Aunque, esto no siempre es posible debido a sus agendas laborales. 

Es por ello que de su casa de Melilla apenas se tenía información hasta la fecha. Gracias a las publicaciones en Instagram del actor, por fin se ha podido conocer cómo es una de las estancias más importantes, la cocina. La que para muchos es considerada como el corazón de cualquier casa, está decorada con azulejos de color azul marino y mobiliario de madera. Un estilo moderno y acogedor coronado por una amplia mesa central donde poder comer y charlar. 

Además, en la imagen se puede ver cómo no falta ningún detalle en la sala. Desde la cafetera a la tostadora o lo que parece ser un hervidor de agua perfecto para un té relajante. Todo ello bajo una amplia ventana con acabados en negro, al igual que las dos lámparas que cuelgan del techo o las sillas que rodean a la mesa. 

Por el momento, poco más se sabe del resto del hogar. Y es que, si algo ha tenido claro la pareja, es que mantendrán en su intimidad todo lo posible para proteger a su familia de las miradas. De hecho, hasta no dar a conocer públicamente su amor, ninguno de los dos había publicado nada al respecto en sus perfiles. 

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