Un bombardeo contra un hospital de Gaza ha dejado al menos 500 muertos, la mayoría civiles, según las autoridades gazatíes, que responsabiliza a Israel. El ataque se ha producido en los jardines del propio centro sanitario, lugar escogido por muchos ciudadanos para refugiarse durante los ataques aéreos, según ha denunciado el ministro de sanidad del movimiento islamista Hamás. Por su parte, Israel acusa a la Yihad Islámica de haber lanzado un cohete fallido que habría impactado en el hospital.

Once días después de que comenzaran los bombardeos israelíes sobre Gaza en respuesta a los ataques de Hamás a civiles que dejaron 1.400 muertos, el de este martes ha sido el más mortífero hasta la fecha. Antes de que se produjera el ataque, el número de palestinos muertos en Gaza ascendían a 3.000 y los heridos a más de 12.000.

Según fuentes locales, en el centro sanitario -una institución cristiana- había unas 2.000 personas que se estaban refugiando tras abandonar sus casas, después del ultimátum del pasado viernes en el que las autoridades israelíes dieron 24 horas para que toda la población del norte de Gaza (más de un millón de personas) abandonara la zona.

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"La horrible masacre cometida por la ocupación sionista" sobre el hospital, "que dejó cientos de víctimas es un crimen de genocidio", declaró Hamás en un comunicado. Según agregó, la mayor parte de fallecidos y heridos son "familias desplazadas, pacientes, niños y mujeres" que en los últimos días se albergaban en el lugar.

El líder político del grupo islamista Hamás, Ismail Haniye, afirmó, por su parte, que la masacre supondrá "un punto de inflexión" en la operación "Tormenta de Al Aqsa" contra Israel. En un discurso, Haniye aseguró que Israel será golpeado "en todos los frentes", tras un ataque, del que Hamás acusa a la aviación israelí.

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En un primer momento, el portavoz militar del Ejército israelí, Daniel Hagari, declaró a la prensa que "Había muchos bombardeos (israelíes), muchos lanzamientos fallidos de cohetes (de las milicias palestinas) y muchos bulos difundidos por Hamás", afirmó Hagari.

Poco después, el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel aseguró que "según el análisis de los sistemas operativos de las FDI, se llevó a cabo un lanzamiento de cohetes enemigos hacia Israel, que pasó en las cercanías del hospital, cuando fue alcanzado". Por tanto, las autoridades israelíes afirman que, según sus fuentes de inteligencia, el responsable del "fallido ataque que afectó al hospital" es la Yihad Islámica palestina.

En escaladas bélicas pasadas, las milicias palestinas lanzaron cohetes a Israel que cayeron dentro de Gaza, y según Israel y medios locales, Yihad Islámica lanzó proyectiles que incluso mataron a palestinos en enfrentamientos anteriores, aunque no hay precedentes de proyectiles que causaran cientos de muertos como ha ocurrido este martes.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sido la primera organización internacional en condenar el ataque al hospital. Su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha reconocido que los primeros informes "indican que hay cientos de muertos y heridos" y ha pedido "protección inmediata de los civiles y la atención sanitaria", además de solicitar que "se revoquen las órdenes de evacuación".

También ha reaccionado al bombardeo el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, que ha recordado que este tipo de ataques "no están en línea con el Derecho Internacional".