Crónica

Creyendo en el futuro con Louis Tomlinson

Louis Tomlinson de concierto en Vancouver.
Louis Tomlinson de concierto en Vancouver.
Andrew Chin
Louis Tomlinson de concierto en Vancouver.

El Wizink Center de Madrid es, sin lugar a dudas, el centro neurálgico del panorama musical madrileño. Ese faro que consigue atraer a miles de amantes de la música a disfrutar de los espectáculos más llamativos. Pero, para que este brille con luz propia en la noche de la capital española, es necesario que haya estrellas, ¿y quién mejor que Louis Tomlinson?

Hace ya más de 13 años desde que el inglés saltase a la fama junto a Harry, Zyan, Nial y Liam. Los cinco, con apenas 18 años de edad, se convirtieron en una de las boybands más exitosas. Ahora, ocho años después de la separación de One Direction, cada uno ha seguido su propio camino. Sin perder el cariño del público y ganando cada vez más adeptos, todos han continuado en los escenarios y el 5 de octubre Louis demostró que aún queda mucho para que deje de estar sobre ellos.

Los alrededores se tiñeron de tres colores: rojo, negro y blanco. Entre nervios, risas, y los últimos vestigios de purpurina antes de que "desaparezca para siempre" del mercado, la sala de conciertos comenzó a llenarse sin problema. A las puertas se veían dos filas, la de quienes no podían evitar correr para conseguir el mejor sitio y la de quienes aprovecharon los momentos antes del espectáculo para hacerse con merchandising "demasiado caro" según algún que otro padre.

Louis Tomlinson en Madrid.
Louis Tomlinson en Madrid.
louist91/ INSTAGRAM

Para las ocho, las pisas y las gradas ya estaban repletas de fans escuchando al grupo The Lathums. Ingleses, al igual que Louis, y con un estilo de rock indie consiguieron animar el ambiente con canciones románticas y de ritmo atrayente. Una hora y diez minutos exactos después, el escenario se llenaría de neblina, luces de los tonos rojizos de los outfits de las fans y los primeros acordes de The Greatest. Una entrada grandiosa para Tomlinson.

Chillidos, algún que otro desmayo, y la voz de todas las seguidoras unidas entonaron los temas del segundo disco del cantante, Faith in the future. Con una camisa negra con estrellas rojas, Louis continuó con temas llenos de energía, Kill My Mind y Bigger than me fueron la mezcla perfecta para dar comienzo al espectáculo. El cantante se movía con libertad en el escenario, de una esquina a otra, desde las gradas más altas a la pista, bajo sus pies, no dudaba en mirar a todos y cada uno de los pares de ojos que no podía apartarse de él.

Dando las gracias a Madrid, a sus fans, y diciendo más veces fucking que cualquier otra palabra, demostró su cariño todas y cada una de las personas que la noche del jueves peregrinaron a la avenida de Felipe II. Y justo allí se superaron todos los límites de decibelios al escuchar Night changes o Where do broken hearts go, porque recordar los temas de One Direction siempre consigue hacer que las fans más veteranas recuerden sus inicios y sueñen con su regreso. Del mismo modo, la sorpresa de la noche fue escuchar al inglés interpretar 505, de Arctic Monkeys.

Louis supo mantener un buen ritmo durante las casi dos horas de concierto. Desde los temas más cañeros, como Chicago, donde se pudieron ver incluso lanzallamas a los momentos más íntimos que evocaba Angels fly con luces tenues. Tras 22 canciones, llegó la hora de decir adiós. Al ritmo de Silver Tongues estallaron los cañones de confeti, y tras gritar como si no hubiera un mañana, se puso fin al espectáculo. La magia no se acabó cuando las luces se encendieron.

A la salida, decenas de jóvenes, y no tan jóvenes, corrieron a despedirse del cantante por la parte trasera del Wizink. Algunas pudieron verle la espalda, otras se quedaron con las ganas de poder continuar la fiesta. Quienes ya no podían más, con la garganta rota de gritar y el rimel corrido por llorar, volvieron o en bus o en metro a sus casas. 

Las líneas que conectan Goya con el resto de Madrid se colapsaron con las fans que montaron su propio concierto improvisado en los vagones. Temas de One Directon volvieron a sonar con cariño y recuerdos de un concierto que tardarán mucho más tiempo en olvidar que el que deberán de esperar para poder recuperar la voz. 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento