Al menos 125 personas han muerto y centenares han resultado heridas en una poderosa explosión de un depósito de combustible en la región de Nagorno Karabaj, habitada por armenios pero perteneciente a Azerbaiyán.

Autoridades locales armenias comunicaron en la mañana del martes que 290 personas han sido hospitalizadas; docenas de ellas "siguen en condición crítica" después de la explosión en las instalaciones cerca de la capital regional, Stepanakert (Jankendi para los azerbaiyanos), el pasado lunes por la tarde. La causa de la explosión sigue siendo desconocida y ninguno de los bandos ha confirmado que se trate de una acción deliberada. 

Cuanto ocurrió la explosión, en las inmediaciones del depósito de combustible se encontraba un gran número de automóviles con karabajíes que querían abandonar el enclave tras la derrota militar la pasada semana ante el ejército azerí.

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Según informó el Gobierno, más de 28.000 personas se vieron obligadas a desplazarse por la reciente operación militar azerbaiyana en Nagorno Karabaj y llegaron a Armenia desde que comenzó la evacuación el domingo.

El primer ministro armenio, Nikol Pashinián, aseguró que Ereván está dispuesto a acoger a todos los karabajíes que quieran abandonar dicho territorio.

El presidente de EEUU, Joe Biden, ofreció este lunes asistencia humanitaria a Pashinián en un telegrama que le hizo llegar Samantha Power, la jefa de la Agencia de EEUU para el Desarrollo