El pasado 25 de junio el partido conservador Nueva Democracia (ND) logró una rotunda victoria en las elecciones generales que celebró Grecia. El partido del primer ministro Kyriakos Mitsotakis consiguió la mayoría absoluta: 40,5% de los votos y 158 escaños de los 300 del Parlamento.

Cuatro días después, Alexis Tsipras dimitió como líder del partido izquierdista Syriza tras su clara derrota. El ex primer ministro griego sólo tuvo el apoyo del 18% de los electores, casi la mitad que en 2019. "Es hora de empezar un nuevo ciclo", reconoció el político.

El conservador Mitsotakis logra la mayoría absoluta en las elecciones griegas

Tres meses después la izquierda helena ya tiene nueva cabeza visible. El elegido por las bases se llama Stefanos Kasselakis y, como en un mundo al revés, fue empleado de Goldman Sachs. Hoy, tiene 35 años y es empresario naviero.

Resultó elegido en la segunda vuelta de unos comicios internos celebrada el domingo. Fueron 133.600 votantes en 537 colegios electorales de todo el país que optaron por alguien que se presentaba como un hombre que supo salir adelante gracias a su esfuerzo individual. Kasselakis obtuvo el 56,69% de los apoyos, por el 43,31% de Efi Achtsioglou, ex ministra de Trabajo.

No soy un fenómeno. Soy la voz de una sociedad y no voy a defraudaros"

"Hoy ha ganado la luz y la esperanza colectiva, la esperanza en el futuro... No soy un fenómeno. Soy la voz de una sociedad y no voy a defraudaros. Mañana empieza el trabajo duro", declaró a sus partidarios tras ser elegido.

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Hasta hace un mes Kasselakis era un desconocido para la mayoría de los griegos. De hecho, su primera aparición en la escena política del país fue en mayo de este año, cuando fue incluido en las listas del partido para las elecciones generales (no salió elegido y tampoco cuando se volvió a votar el 25 de junio).

Un empresario greco-estadounidense

Nació en Atenas en 1988, pero desde sus 14 años vivió en Massachusetts (Estados Unidos) tras ganar una medalla en un concurso matemático. Allí, con beca, se graduó en Finanzas y en Estudios Internacionales en la Universidad de Pensilvania. Siendo estudiante, trabajó como voluntario en la campaña de Joe Biden (entonces senador) para las primarias del Partido Demócrata de 2008.

En 2009, con 21 años, Kasselakis fue contratado por Goldman Sachs, donde, según relató él mismo, constató "la arrogancia que trae el dinero", por lo que decidió renunciar a su puesto. Sin embargo, el poso norteamericano está ahí y en lo que se refiere a la economía y los derechos sociales es más bien liberal.

También trabajó en el 'think tank' del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales de Washington D.C. Más tarde fundó la naviera Swift Bulk.

No tengo una agenda gay, tengo una agenda humana"

Durante muchos años fue columnista del 'New York National Herald'. Al estallar la crisis económica de Grecia, fundó una plataforma sin ánimo de lucro para ayudar a los jóvenes a trabajar o estudiar en el extranjero. Habla con fluidez inglés, alemán, francés y español.

Kasselakis se declaró homosexual durante la campaña a los comicios internos de Syriza, por lo que se ha convertido en el primer líder político que ha admitido públicamente su homosexualidad en la historia de Grecia. "No tengo una agenda gay, tengo una agenda humana", señaló en un vídeo de promoción publicado en las redes sociales. Por eso defiende la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo.

¿Viaje al centro?

ALEXANDROS VLACHOS/EFE

Hasta hace unos meses el nuevo político aún residía en EE UU, en Miami concretamente. Se trasladó a Atenas junto a su marido estadounidense Tyler McBeth, a quien, ante la militancia, llamó "mi familia personal". A la vista de lo dicho en las primarias, parece que de EE UU no sólo se trajo un marido.

Apoyamos a Kasselakis porque quiere mover el partido hacia el centro, el terreno que Syriza perdió en las últimas elecciones"

"Stefanos, cámbialo todo", le gritaban sus partidarios y eso es lo que pretende. Kasselakis ha asegurado que si Syriza quiere volver a gobernar debe "copiar la fórmula estadounidense lo antes posible" y transformarse en un partido de más amplio espectro al estilo estadounidense como el partido demócrata; o sea, aún más moderado.

Todo se entiende mejor a la luz de las palabras de Evangelos Antonaros, ex diputado del partido conservador gobernante Nueva Democracia, que se presentó con Syriza a petición de Tsípras. "Apoyamos a Kasselakis porque quiere mover el partido hacia el centro, el terreno que Syriza perdió en las últimas elecciones. Se restablecerá con mentes y puertas abiertas", ha dicho.

En realidad, el empresario greco-estadounidense no ha presentado un programa detallado, lo que ha sido muy criticado por la parte de Syriza que no está de su parte. Se sabe, por artículos y declaraciones que, propone la separación de la Iglesia y el Estado, una "drástica" reducción de impuestos para los empleados del sector público y privado o la ciudadanía para los hijos de inmigrantes nacidos y criados en Grecia.