El portal Vanitatis ha publicado que el segundo hijo de la infanta Cristina y de Iñaki Urdangarin, Pablo, se cambia de casa.
El joven, jugador profesional de balonmano en el Granollers, estaba viviendo hasta ahora en Sant Joan Despí, una zona confortable pero alejada del centro de Barcelona.
Pablo, según Vanitatis, ha decidido mudarse a un piso más amplio y luminoso, situado en el exclusivo Pedralbes, donde sus padres compraron una millonaria casa que les costó no pocos disgustos. Vivienda que tuvieron que vender cuando empezó a fraguarse el caso Noos y los Urdangarin-Borbón decidieron irse a vivir a Washington.
La nueva casa mediría 150 metros cuadrados, divididos en tres habitaciones, dos baños, una gran cocina y salón con vistas, ubicado en una bonita zona ajardinada con piscina.
Pablo pagaría por esta nueva propiedad en alquiler 2.500 euros al mes, aunque quizás decida compartir más adelante con algún compañero, de su nuevo equipo.
El segundo hijo de Cristina e Iñaki pasa mucho tiempo en casa de su novia, Johanna Zott, de origen galo, a quien conoció siendo joven en el Liceo Francés de Barcelona.
Años después de reencontrarse, la pareja vive felizmente su relación. Ella, que tiene dos hermanas más, estudia Medicina y vive con sus padres, profesor y médica, en una zona residencial de la capital.
Johanna acude siempre que puede a ver a su novio jugar, y sus gestos de complicidad y espontaneidad son muy reveladores. Siempre le apoya y anima, en la victoria y en la derrota. Y además mantiene una estrecha relación con los padres y hermanos de su novio.
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