Ruby Franke, la influencer conocida por su canal familiar '8 Passengers' donde mostraba la vida de sus seis hijos, ha sido detenida tras la sospecha de dos cargos de grave abuso infantil. 

La policía de Ivins, una localidad de Utah (Estados Unidos), ha anunciado este pasado 30 de agosto que está bajo custodia policial, junto con Jodi Hildebrandt, su compañera de negocios. 

Según las últimas informaciones salidas a la luz, este arresto ha tenido lugar después de que un niño escapara por la ventana de la casa de Hildebrandt y alertara a los vecinos sobre la complicada situación familiar. 

"El niño corrió a pedir ayuda, así como agua y comida", ha revelado el Departamento de Seguridad de Santa Clara a medios como Insider: "Los vecinos notaron que tenía cinta aislante en los tobillos y las muñecas y decidieron llamar a la policía". 

En el hospital, el pequeño fue tratado de "severas" heridas y desnutrición. Una situación que llevó a inspeccionar el mencionado domicilio, donde encontraron otro niño "en la misma condición de malnutrición". 

Además, otros cuatro menores fueron llevados bajo el cuidado de los Servicios Sociales. Las autoridades señalan que Franke grabó un vídeo en esa misma casa hace apenas dos días, por lo que creen que estaba al tanto de los abusos y la han acusado de "abusos, malnutrición y negligencia".

En redes sociales, muchos seguidores del canal han expresado su alivio, ya que aseguraban que llevaban "años" viendo y denunciando el tipo de comportamiento que Franke tenía con sus hijos. 

El canal, donde aparece también su marido Kevin Franke, y sus seis hijos, Shari, Chad, Abby, Julie, Russel y Eve, llegó a tener 2,5 millones de suscriptores, aunque fue retirado hace unos meses por motivos desconocidos. 

Desde 2022, Ruby Franke ha estado más centrada en un nuevo canal llamado ConneXions donde hablaba de fé y familia junto con Jodi Hildebrandt. Su compañera se consideraba experta en psicología infantil, a pesar de que en 2012 le revocaron la licencia durante 18 meses. 

Este perfil, acusado de parecer "una secta", hizo que su hija mayor, Shari confirmara en redes sociales que había decidido no seguir en contacto con su familia. Ahora, tras la noticia, ha escrito en Instagram: "Por fin". 

INSTAGRAM

"Hoy ha sido un día muy importante", ha confesado: "Mi familia y yo estamos muy contentos de que se haya hecho justicia. Hemos intentado contarle esto a la policía y a los Servicios Sociales durante años y por fin han decidido intervenir".

De momento, falta por saber dónde se encuentra el padre, Kevin, o el segundo hijo más mayor, Chad, ya que ambos llevan meses sin aparecer en las redes sociales de Ruby, desde que se cerró el canal familiar.  

La hermana de Ruby, que también ha comenzado una carrera en redes sociales mostrando a sus cinco hijos, ha publicado también un comunicado. "Durante tres años nos hemos mantenido en silencio por el bien de los niños", ha asegurado. 

"Hemos hecho todo lo que hemos podido detrás de las cámaras para asegurar que estaban bien", han reconocido, señalando que no quieren volver a hablar del tema. 

"Ruby ha sido arrestada, y era necesario. Jodi ha sido arrestada, y era necesario. Ahora los niños están a salvo, que era mi prioridad", ha concluido.