En Hollywood los matrimonios van y vienen y cuando se rompen suelen dar para años de noticias por los pleitos y peleas de los excónyuges, en los que se incluyen demandas, pullas públicas y demás enfrentamientos. 

Quizá por eso la madurez y sentido común de Reese Witherspoon y Jim Toth es toda una excepción, a tenor de los detalles de su acuerdo de divorcio, hechos públicos por el diario US Magacine. 

La empresa encargada de las hamburguesas de MrBeast le acusa de intentar "distraer la atención del incumplimiento de los acuerdos"

La actriz, de 47 años, y su exmarido, de 53, tendrán la custodia compartida de su hijo Tennessee, de 10 años, por lo que ninguno de los dos pasará pensión al otro, pues ambos superan los 100.000 dólares de ganancias anuales. 

La pareja llevaba 12 años de matrimonio cuando de mutuo acuerdo decidieron divorciarse. Así, tienen muchas cosas en común, que han decidido repartirse equitativamente, entre otras cosas muebles, obras de arte y otros artículos del hogar. Además, cada uno conservará su coche y su cuenta bancaria.

Cuando el pasado marzo tomaron la decisión de separarse hicieron un comunicado que dejaba clara la buena sintonía entre ellos, a pesar de todo. "Es con mucho cuidado y consideración que hemos tomado la difícil decisión de divorciarnos", escribieron Witherspoon y Toth a través de Instagram. 

"Hemos disfrutado muchos años maravillosos juntos y estamos avanzando con profundo amor, amabilidad y respeto mutuo por todo lo que hemos creado juntos", decían y añadían que su "prioridad" era su hijo y su familia mientras "navegaban" por ese nuevo capítulo de sus vidas.