El conflicto por las okupaciones de la plaza Bonanova de Barcelona vuelve a tomar protagonismo esta semana, cuando está prevista una cita de la propiedad y los okupas ante la justicia y dos protestas opuestas: una este martes de colectivos antifascistas y otra el jueves de la empresa de desalojos forzosos Desokupa.

El Juzgado de Primera Instancia 39 de Barcelona celebrará este miércoles una vista previa por la demanda de la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) que ha reclamado el desalojo del edificio okupado la Ruïna.

En la vista, la propietaria del edificio de la plaza Bonanova y la defensa de los ocupantes, que se han opuesto al desalojo, expondrán sus respectivos argumentos sobre el procedimiento que en los últimos días ha motivado protestas y ha sido tema de debate en la campaña electoral municipal.

La protesta antifascista de este martes está prevista en la plaza Universitat a las 19 horas. "En los últimos meses, en Barcelona asistimos a una situación de desenfreno del fascismo en nuestros barrios, calles, casas y cuerpos. Los acontecimientos de las últimas semanas, el despliegue de violencia en los ataques y campañas contra La Ruïna y el Kubo son una muestra clara del nivel de peligrosidad que estos elementos reaccionarios representan", denuncian los distintos colectivos convocantes de la movilización. 

Por su parte, el fundador de Desokupa, Dani Esteve, ha llamado a manifestarse a favor de los desalojos forzosos este jueves 25 de mayo a las 21 horas también en la plaza Universitat de Barcelona y ha asegurado que los Mossos no descartan detenerle durante la protesta.

El fundador de Desokupa convoca una manifestación el jueves en Barcelona: "Si me quieren detener, que lo hagan"

Dos procedimientos diferentes

El procedimiento judicial sobre la Ruïna se está tramitando diferente al que pesa sobre el edificio contiguo y que también está ocupado, el Kubo, porque en este caso los ocupantes sí que han contestado a la demanda.

Al no contestarse la demanda sobre el Kubo, el Juzgado de Primera Instancia 3 acordó el desalojo a petición de la Sareb, y la finca está pendiente de una nueva fecha de desahucio después de que el 23 de marzo los Mossos d'Esquadra intentaron desalojarla, pero el lanzamiento quedó suspendido ante la falta de "garantías de seguridad y eficacia".

En este sentido, la Sareb explicó que el desalojo del 23 de marzo se paralizó "con el objetivo de proceder al desalojo de ambos edificios de manera conjunta para garantizar la seguridad de la zona".

Sin embargo, el desalojo de la Ruïna está solicitado, pero los ocupantes se han opuesto y la jueza todavía no ha decidido al respecto, algo que hará después de la vista de este miércoles.