Los Mossos d'Esquadra han denunciado por presunta desobediencia a doce jóvenes contrarios a las ocupaciones de los edificios la Ruïna y el Kubo de la plaza Bonanova de Barcelona cuando ya habían concluido las dos manifestaciones de signo contrario, en las que un grupo de partidarios de la okupación han lanzado piedras contra algunos comercios.

Fuentes de la policía catalana han explicado que sobre las 05.00 horas una docena de personas antiokupas se han acercado a los edificios el Kubo y La Ruïna desoyendo las órdenes de los agentes que había allí, por lo que les han denunciado en virtud de la Ley de Seguridad Ciudadana.

La policía catalana mantiene un dispositivo de seguridad en la zona, que este viernes por la mañana no corta el tráfico y consta de una furgoneta del Área Regional de Recursos Operativos (Arro) en la plaza.

Los 12 jóvenes han desoído en reiteradas ocasiones las indicaciones de los policías para que desistieran de su actitud, por lo que finalmente han sido denunciados por desobediencia a agentes de la autoridad.

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Aunque las dos concentraciones de este jueves por la noche a favor y en contra de la okupación de estos dos edificios propiedad de la Sareb se desarrollaron sin grandes altercados, un grupo de personas partidarias de los okupas lanzó piedras contra algunos comercios de la zona.

Hacia las 22:00 horas, esta concentración partidaria de la okupación inició un recorrido en dirección a la avenida de Vallcarca escoltada por la BRIMO, durante el cual se produjo este lanzamiento de piedras contra varios establecimientos comerciales.

Otro incidente se produjo cuando parte de estos manifestantes a favor de los edificios okupados intentó saltar la línea policial, lo que obligó a los antidisturbios de los Mossos a realizar una maniobra de dispersión para restablecer la situación, que se normalizó rápidamente.

En el macrodispositivo de los Mossos, que estuvo dirigido desde el Centro de Coordinación (CECOR), participaron cerca de 300 efectivos de distintas unidades, como la de seguridad ciudadana, ARRO, BRIMO, Grupo Regional de Motos, además de agentes de paisano y de información.

Por su parte, la Guardia Urbana desplegó cerca de 80 efectivos en el entorno de la plaza de la Bonanova.