Sindy Takanashi, presentadora del pódcast Queridas Hermanas, ha desactivado su cuenta de Twitter después de recibir cientos de críticas por su entrevista con Irene Montero en el último episodio de la temporada. 

La influencer, que quiso defender su postura en contra de la Ley Trans, usó su propia cuenta para promocionar un encuentro donde aseguraba que iba a interrogar a la Ministra de Igualdad sobre todas las cuestiones que han enfrentado al movimiento feminista en los últimos años.

Sin embargo, horas después de publicar la entrevista en la mañana del miércoles, su cuenta de Twitter ha desaparecido. En sus menciones, cientos de comentarios descontentos por haberse mostrado de acuerdo con Montero. 

La autodeterminación de género ha sido el tema central del debate. Y, sobre todo, los intentos de fraude de ley de varios creadores de contenido que se han grabado mostrando como han acudido al registro civil para cambiar de género. 

Sindy ha insistido a la ministra para que explique cómo se persigue el fraude de ley. Sin embargo, Montero no ha querido dar todos los detalles para asegurarse de que no haya más "indecentes" intenten "desafiar al estado". 

Como sea, ha repetido, una y otra vez, que esta supuesta amenaza, de la que "aún no hay ningún caso", "no es un argumento sustancial para impedir el reconocimiento de los derechos de las personas trans".

Un aplaudido discurso que ha sido usado para muchos defensores de la Ley Trans para aplaudir a Irene Montero y asegurar que este encuentro ha perjudicado a Sindy. Sobre todo, cuando ha querido quejarse de que el Ministerio de Igualdad se ha preocupado más por las personas trans que por las mujeres. 

Montero ha enumerado todas las políticas que ha hecho para beneficiar a las mujeres: ampliación de derechos para las lesbianas, derecho a asesoramiento después de violaciones, política de conciliación, protección de los derechos de las mujeres prostitutas, la ampliación del 016...

Para muchos, el debate le ha quedado grande a Takanashi que se ha querido retractar de sus propios argumentos negativos y ha intentado posicionarse al mismo tiempo a favor y en contra del discurso de Montero. 

Cuando ha tenido que explicar por qué "la ley trans es una ley antifeminista" a pesar de estar a favor de que "las mujeres trans son mujeres", simplemente ha declarado: "No lo sé, yo no soy política". 

Montero le ha dejado claro que sus críticas son "mentira". La Ley Integral de Violencia de Género ni se ha vulnerado ni podrá vulnerarse porque la Ley Trans así lo contempla. Aun así, "si una mujer ejerce violencia, el sistema la castigará".