Un total de 365.100 vehículos, el 96,1% de los previstos, han abandonado el área de Barcelona entre el mediodía del jueves y las 15:00 horas de este viernes en la segunda fase de la operación salida de Semana Santa, que ha finalizado con un muerto en accidente y con un pico de retenciones en varios tramos que han sumado 150 kilómetros.

Según ha informado el Servicio Catalán de Tráfico (SCT), este año han salido un 3,2% menos de vehículos que el año pasado, si bien la víspera por la mañana hubo conductores que anticiparon la salida.

En el marco de la operación salida se ha registrado una víctima mortal en un accidente ocurrido esta madrugada cuando un turismo se ha salido de la vía en la L-310, en Tàrrega (Lleida), y su conductor ha fallecido.

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Desde el inicio del periodo festivo -el pasado fin de semana- se ha registrado otro fallecido en accidente, en este caso el conductor de un turismo que chocó frontalmente con un camión el pasado miércoles en la C-221, en Batea (Tarragona).

Según Tráfico, la movilidad de la operación salida se ha distribuido de forma parecida hacia destinos de montaña y de playa, de forma que los desplazamientos hacia la costa se han concentrado en la AP-7 y en la C-32 y hacia la montaña especialmente en la C-16.

A lo largo de la mañana de este viernes las principales retenciones se han acumulado entre las 11:00 y las 13:00 horas, especialmente en la franja de las 12:00 horas, que ha sido la hora punta de salida, con 30.000 vehículos abandonando la corona metropolitana.

Según los datos de Tráfico, el pico de las retenciones en toda Cataluña ha sumado 150 kilómetros, en varios tramos, ligeramente por debajo del año pasado.

Pese a que la mayoría de retenciones se han concentrado en la AP-7, esta autopista libre de peaje ha registrado en esta operación salida un 38% menos de retenciones que el pasado año.