Ortega Cano rehace su vida tras su divorcio de Ana María Aldón y se deja ver "muy cómplice" con una amiga, según 'Semana'

José Ortega Cano, en Madrid.
José Ortega Cano, en Madrid.
GTRES
José Ortega Cano, en Madrid.

Después de que Ana María Aldón diera nuevos detalles que confirman que el divorcio entre ella y José Ortega Cano ya es una realidad, el torero ha decidido que es hora de pasar página y mirar hacia adelante. 

Según señala la revista Semana, que publica un amplio reportaje de aquella noche, el torero disfrutó recientemente de una velada con su círculo más íntimo (su hermana Mari Carmen y su cuñado Aniceto) y "una amiga" -tilda la publicación- con la que se mostró "muy cercano y cómplice" toda la velada.

Se trata de la primera salida de Ortega Cano tras su acuerdo de divorcio con la diseñadora. En ella, fue a cenar y en la mesa, siempre según la revista, se sentó junto a esta amiga, "mostrándose muy cercanos y compenetrados".

Además, cuenta Semana, al salir del restaurante "dieron un paseo solos por las calles de Madrid, charlando animados y sonrientes". Por último, señala, "fueron muy juntos caminando hasta el parking donde estaba el coche".

Hace unos días, la diseñadora, expareja ya del diestro, contó en el programa Fiesta, donde colabora, que tanto ella como el torero han acudido al notario y han firmado un acuerdo.

"El acuerdo está firmado, todo está cerrado", indicó la colaboradora de Fiesta, que explicó por qué ha visitado hasta en dos ocasiones al notario. "Hay gente que piensa que uno va al notario y ya se separa allí. Eso puede ocurrir si no hay hijos, cuando los hay, hay que ir a otro sitio, al juzgado. Las visitas al notario han sido por un trámite que necesito para el divorcio, documentos", justificó.

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