El acoso cibernético podría haber sido el motivo de la profunda depresión a la que el cantante Aaron Carter, fallecido a los 34 años, se enfrentó en su última etapa de vida, según ha informado el que fuera su mánager, Taylor Helfeson, a Page Six.

El exempleado del artista ha explicado que el acoso en las redes sociales "fue como una pesadilla" para el joven, pues era "implacable" y, como era de esperar, "lo afecto".

"Él nunca eligió su vida… No creo que se le hayan dado las mismas herramientas que muchos de nosotros tenemos para navegar en la vida de una manera que nos deje espacio para vivir experiencias sostenibles y buenas", ha apuntado Helfeson.

El artista leía las críticas que el público le dejaba en Internet sin evitar sentirse dolido por sus palabras. "Miraba estas cosas y le dolía mucho", ha desvelado Helgeson, añadiendo que Carter "parecía que no podía mantenerse alejado" de las redes sociales.

Hace unos días, Helgeson también habló con The Sun sobre los últimos mensajes que el joven había intercambiado con su hermano. "Estaba extremadamente optimista", comentó.

"Han pasado algunos años desde que lanzamos Love y él estaba listo para hacer otro. Era la primera vez en mucho tiempo que estaba tan emocionado. Tenía mucho para dar", comentó el mánager sobre el intercambio de mensajes que tuvo con Aaron horas antes de que fuera encontrado muerto en su casa de Lancaster, California (EE UU).

Dos semanas después de la misteriosa muerte de Carter, que fue encontrado sin vida el pasado 5 de noviembre en su bañera, siguen desvelándose detalles acerca del acontecimiento. El certificado de defunción llegó a manos de TMZ, que informó que la familia había decidido incinerar el cuerpo del cantante.