Casi cuatro de cada 10 pisos de alquiler habitual en Barcelona son de grandes tenedores, es decir, personas físicas o jurídicas con más de 10 fincas en propiedad, según marca la normativa estatal. Así lo indica una publicación del Observatori Metropolità d'Habitatge de Barcelona (O-HB) hecha con la colaboración del Ayuntamiento de Barcelona y el Institut Català del Sòl (Incasòl). 

El informe, que se basa en datos de 2021, estima concretamente que hay 290.416 viviendas principales de alquiler habitual en Barcelona y que un 36,1% de estos están en manos de grandes tenedores. Esto se traduce en unos 104.500 pisos. También destaca que más de la mitad de todas las fincas que se alquilan de forma habitual son de propietarios que tienen más de tres pisos.

En cambio, los pisos de titularidad pública del parque de alquiler habitual en la ciudad solo representan el 4,4%.

La regidora de Habitatge i Rehabilitació, Lucía Martín, y la presidenta del O-HB, Carme Trilla, han coincidido en destacar en rueda de prensa desde el consistorio este viernes que Barcelona tiene un peso muy elevado del mercado de alquiler y han hecho énfasis en el porcentaje de pisos en manos de grandes tenedores y en la necesidad de regular los precios de todo tipo de alquileres.

Los grandes tenedores concentran  buena parte del parque 

Según las estimaciones hechas por el O-HB, las viviendas de alquiler en manos de grandes propietarios, según las define la normativa estatal (personas físicas o jurídicas con más de 10 viviendas en alquiler), en 2021 representarían el 2,1% del global de propietarios de alquiler de Barcelona y dispondrían del 36,1% del parque de alquiler. Si, en lugar de estimaciones, se coge la base de datos del Incasòl, la cifra de viviendas en manos de grandes tenedores baja hasta el 29,6%.

En cualquier caso, los pisos de alquiler habitual en manos de grandes tenedores podrían ser más del 36,1% que estima el O-HB, ya que el informe 'Estructura i concentració de la propietat d'habitatges a Barcelona. 2021' calcula los grandes propietarios en función de las propiedades que tienen exclusivamente en la ciudad. 

Es decir, en los resultados no se pueden considerar los totales que exigen las normativas catalana y estatal, ya que también se tendrían que incluir las viviendas de alquiler habitual propiedad de alguien que suma más de 10 fincas entre Barcelona y otros municipios de Cataluña o del resto del Estado.

Otra limitación que admite el O-HB es que tampoco se conocen los vínculos corporativos entre personas jurídicas, lo que también dificulta la cuantificación real de grandes propietarios. En todo caso, el estudio estima que el porcentaje del 36,1% de pisos de alquiler en manos de grandes tenedores aumentaría hasta el 37% si también se tienen en cuenta otras formas de alquiler no usuales, como los apartamentos turísticos.

Para estimar el volumen global del parque de viviendas de alquiler habitual de la ciudad, el O-HB aplica al total de 754.326 viviendas principales de la ciudad el porcentaje del 38,5% de viviendas con hogares en alquiler que apuntaba la Enquesta Sociodemogràfica de Barcelona de 2020. Según esto, el parque de viviendas principales de alquiler habitual de Barcelona se situaría en las 290.416 unidades.

A partir de aquí, el estudio se fija en la concentración de propiedad según la información obtenida a través de la base de datos del Incasòl. Una de las características que destacan de este análisis es que en el parque de alquiler se da una mayor concentración de propiedad que en el parque general. Y es que las personas propietarias que tienen más de tres viviendas disponen del 51,4% del total de pisos de alquiler mientras que, en el parque general, este tipo de propietarios solo disponen del 30,6% del parque.

Otra característica del parque de alquiler es que las viviendas en manos de propietarios que son personas jurídicas tienen mucho más peso (35,5%) que en el conjunto del parque de viviendas de la ciudad (15,1%). Las que están en manos de personas físicas continúan siendo mayoritarias: 65,5% en el parque de alquiler frente al 84,9% en el conjunto del parque. Por contra, el 77,3% de las viviendas de grandes tenedores son personas jurídicas. De estas, la mayoría (68%) son empresas.

Un dato a destacar es que las 12.893 viviendas de titularidad pública -que suponen el 1,7% del parque global- representan el 4,4% del parque de viviendas principales de alquiler habitual en la ciudad. Estas viviendas de titularidad pública tienen un peso elevado en los barrios más periféricos y en gran parte del distrito de Ciutat Vella y llegan a representar más del 20% del total de pisos de los barrios de Can Peguera, Torre Baró, Vallbona y Baró de Viver. Las 12.893 viviendas de titularidad pública supondrían el 12,3% del total de pisos en alquiler habitual en manos de grandes tenedores, de acuerdo con las estimaciones del O-HB.

Por contra, las viviendas de alquiler en manos de grandes tenedores con otro tipo de titularidad que no sea pública tienen un peso elevado en barrios como el Raval, el Gòtic, Sant Antoni o la Vila de Gràcia.

El Ayuntamiento defiende la regulación del precio de todos los alquileres

La regidora Lucía Martín ha reiterado que cualquier normativa que afecte a la regulación de precios de alquiler es "muy relevante" para Barcelona. Según ha dicho, los datos publicados en el estudio demuestran que las viviendas que se alquilan en la ciudad no están en manos de "muchos pequeños propietarios". Las cifras, ha añadido, ponen de relieve el hecho de que más de la mitad de los propietarios de pisos de alquiler tienen tres o más solo en Barcelona ciudad. "Por lo tanto, rompe un relato y significa también regular precios", ha afirmado.

Martín, además, se ha mostrado crítica con la propuesta del Ministerio de Agenda Urbana que plantea actuar sobre grandes propietarios y dejar fuera a los que tienen menos de 10. Esto, ha estimado la regidora, querría decir dejar fuera a más de 400.000 personas que viven de alquiler en Barcelona (las que se calculan que pueden vivir en el 64% de los pisos que no son de grandes propietarios).

Por lo tanto, ha concluido, "no tiene ningún sentido proponer una regulación de precios que no se aplica a todas las viviendas". En una línea similar se ha expresado Carme Trilla, que ha indicado que hacer una distinción entre grandes y pequeños tenedores a la hora de hacer una regulación de alquileres sería "absurdo" si lo que se pretende es "enfriar el mercado".

Trilla también ha recordado que durante el siglo XX el parque de alquiler se ha ido perdiendo en la ciudad de Barcelona y llegó a situarse por debajo del 30% del parque total de vivienda, a pesar de ser uno de los porcentajes más altos de España. Desde entonces, ha afirmado, se ha ido recuperando el mercado de alquiler y ha crecido mucho en los últimos 10 años, entre 2011 y 2021. "Es una cifra que destaca mucho respecto a los parques del entorno", ha concluido.