El acuerdo prenupcial, clave en el divorcio entre Tom Brady y Gisele Bündchen

Tanto la ex modelo de Victoria's Secret como su marido son grandes admiradores de un libro de autoayuda que leen una vez al año: 'Los cuatro acuerdos'.
Tom Brady y Gisele Bündchen.
JUSTIN LANE / EFE
Tanto la ex modelo de Victoria's Secret como su marido son grandes admiradores de un libro de autoayuda que leen una vez al año: 'Los cuatro acuerdos'.

A pesar de lo enamorados que estaban, una persona previsora vale por dos. Y nunca se sabe si, como en este caso, y a pesar de los 13 años juntos y los dos niños en común, no llegará el divorcio. Por ese hipotético caso que finalmente ha llegado, Tom Brady y Gisele Bündchen firmaron un acuerdo prenupcial que ha sido clave en la facilidad con la que han llevado su reciente separación.

Según explican varias fuentes internas desde las páginas de Page Six, ha sido gracias a dicho acuerdo que no tendrán problemas legales entre ellos, dado que por la parte de los niños han sabido manejar la situación mientras el quaterback quiera seguir en la élite de la NFL y la supermodelo retomar su carrera sobre las pasarelas, y por la parte financiera o habrá siquiera divisiones.

Desde el medio puntualizan que ya a finales de su matrimonio y para el futuro cada uno ha estado manejando su fortuna y sus negocios de manera totalmente separada e independiente del otro. De hecho, se estima que Brady tendría una cuenta de 335 millones de dólares, si bien la de su ya exesposa es a lo mayor y se cree que alcanza los 400 millones.

"Antes de casarse en 2009, se estableció con acuerdo de ambas partes un contrato prenupcial totalmente blindado. Los dos tienen sus propias compañías comerciales separadas, por lo que la separación de su patrimonio no ha sido tan difícil al acabar [su relación]. El único factor importante ha sido dividir la enorme cartera de propiedades del matrimonio", ha declarado un informante.

De esta forma, cada uno mantiene sus actividades empresariales por separado, si bien se cree que el jugador de los Tampa Bay Buccaneers, de 45 años, se ha quedado con la mansión de 17 millones de dólares que aún está construyéndose en Indian Creek Island, en Miami, mientras que Bündchen se ha quedado con la mansión vacacional de Costa Rica y se ha comprado una modesta casita de tres habitaciones en Miami.

Asimismo, falta por saber quién se queda con las otras propiedades de la pareja que enlista el citado medio (una casa en las Bahamas, otra en una exclusiva urbanización en Montana y un apartamento en Nueva York) o si decidiran de mutuo acuerdo ponerlos a la venta. Lo que sí es seguro es que ambos deseaban la custodia compartida de sus hijos.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento