Llega el invierno y las bajas temperaturas, por lo que son muchas las familias que están pensando en las formas más económicas de calentar el hogar, sobre todo, teniendo en cuenta la inflación de los precios en los últimos meses.

De este modo, esta es la época en la que las personas que tienen chimenea en el hogar buscan ya los elementos para encenderla, es decir, adquieren las provisiones de leña necesarias para pasar el invierno. Sin embargo, esta es una opción más cara. 

Este año está en auge una de las alternativa a las chimeneas, que son las estufas de pellets. Este material es más barato que la leña e, igualmente, sirve para encender las estufas que están preparadas para ello.

Lo cierto es que, lo primero que hay que tener en cuenta es que los pellets deben utilizarse en las estufas que están preparadas para prender este tipo de material, aunque haciendo unas remodelaciones muy sencillas se puede convertir la chimenea de leña en una estufa de pellets.

Opciones para convertir la chimenea en estufa de pellets

Las estufas de pellets son las que utilizan este material como combustible y transformar la chimenea de leña para utilizar estos pellets más económicos es muy fácil. 

La primera de las opciones se da en caso de tener una chimenea abierta, es decir, que no tiene cristal en su parte frontal. En estos casos, se puede instalar un aplique de pellet en la estructura de la chimenea ya existente. Igualmente, habrá que entubar el humero también existente en la antigua chimenea. De este modo, se podrá usar la chimenea con pellets.

En caso de tener una chimenea más moderna de leña, se pueden comprar e instalar lo que se conoce como quemador de pellets, un elemento que funciona como un adaptador de pellets para la chimenea que se puede colocar en la chimenea convencional y así usar los pellets de forma segura.