El jurado popular ha declarado por unanimidad a M. J. B. N., alias El mexicano, culpable de haber matado "intencionadamente" a su amigo C. R., decapitarlo y pasearse por la calle con su cabeza en un bolsa a finales de octubre de 2020.
La lectura del veredicto tuvo lugar poco antes de las 23.00 h, después de que a las 14.30 h se entregara a los tres hombres y seis mujeres que componen el jurado el objeto compuesto por 18 preguntas que tuvieron que contestar y motivar.
El jurado consideró que el acusado "aprovechó su relación de amistad" con la víctima y que le asestó "intencionadamente" el golpe que le provocó la muerte mientras estaba agachado, como determinan los informes forenses.
También por unanimidad lo encontraron culpable del delito de profanación de cadáver, si bien no así del delito de robo del que lo venía acusando la acusación particular.
Tras la lectura del veredicto, la Fiscalía y la acusación particular mantuvieron sus peticiones de condena: la primera solicita 24 años y cinco meses de prisión por parte de la Fiscalía, al considerarlo responsable de un delito de asesinato y de otro de profanación de cadáver.
Por su parte, la acusación particular, ejercida por el abogado Marcos García Montes en representación de la familia de la víctima, le solicita 32 años y cinco meses de prisión: 25 años por un delito de asesinato; cinco años por el de robo con violencia; dos años por otro contra la integridad física y moral; y cinco meses por el de profanación de cadáver.
El juicio ha quedado visto para sentencia y será el magistrado presidente del mismo, Florentino Ruiz Yamuza quien determine si finalmente el acusado será condenado por el delito de asesinato o el de homicidio.
"Realmente arrepentido"
El acusado, que permanecerá en prisión preventiva hasta que se conozca la sentencia, hizo uso de su última palabra para pedir perdón a la familia: "Me siento realmente arrepentido por esa acción inadecuada", dijo.
Los hechos por los que esta persona ha sido juzgada tuvieron lugar entre los días 30 y 31 de octubre de 2020.
El día 30 de octubre, después de comer, el acusado acudió a la casa de su amigo C. R., donde ambos comenzaron a arreglar una bicicleta propiedad de este. Ya por la noche, en un momento no determinado aprovechó que este último le había dado la espalda y estaba agachado para golpearlo con un objeto contundente y matarlo; seguidamente, agarró el cuerpo lo llevó a una habitación y le seccionó la cabeza.
Después, metió la cabeza en una bolsa y la dejó entre las ramas de un árbol de una plaza próxima. Ya por la tarde del día 31, el acusado regresó a por la cabeza y se dirigió con ella a unos contenedores con la intención de tirarla. Fue en ese momento, al ser interpelado por una mujer sobre lo que llevaba en la bolsa cuando comenzó a exhibirla.
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