El histórico frontón Beti-Jai, en Chamberí, podrá ser cubierto y se ampliarán sus usos al ámbito cultural, educativo y deportivo. Este jueves se ha aprobado de forma inicial un nuevo Plan Especial para poder darle una nueva vida al inmueble con el objetivo de "poner en valor este edificio singular y permitir que, definitivamente, entre en funcionamiento y lo disfruten los ciudadanos", ha señalado la portavoz de Emergencias y Seguridad, Inmaculada Sanz.

Este edificio se encuentra en la calle Marqués de Riscal, está rodeado de viviendas y ocupa el centro de una manzana con una superficie de 4.579,94 m2. Este inmueble fue sometido a numerosas obras para poder recuperarlo y salvarlo de la ruina, pero se encuentra en desuso debido a las limitaciones que acarrea su condición exclusiva como uso dotacional deportivo.

Además, este plan corrige las deficiencias del anterior, aprobado en 2017 y anulado por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) en noviembre de 2018 "por ausencia de estudios". Con este nuevo régimen de usos, más amplio, se facilitan las condiciones para la puesta en funcionamiento del edificio al servicio de la ciudad, sin perjuicio de la protección de las características arquitectónicas del frontón ni de que se puedan reservar o priorizar actividades de carácter deportivo.

Se podrá autorizar el cubrimiento del patio y de la cancha de juego en las condiciones previstas en las Normas Urbanísticas. Siempre que se ajuste a lo establecido, la cubierta será traslúcida, ligera y disociada de la edificación. De este modo, no se afecta a los valores que motivaron la declaración del inmueble como Bien de Interés Cultural (BIC), ya que desde el espacio interior se puede seguir apreciando el tratamiento de fachada urbana, creando la percepción de plaza pública.

La declaración BIC (Bien de interés Cultural) cita como uso característico el deportivo, si bien se estima que podría albergar otros usos siempre que se respeten los valores fundamentales que definen el inmueble y su incorporación sea compatible con los criterios de intervención descritos en el Decreto de declaración, entendiendo como tales la comprensión de su configuración espacial, los materiales y sistemas constructivos originales y la decoración propia de cada una de sus partes.

El incremento de un 10% sobre la edificabilidad existente se podrá autorizar, en su caso, situado bajo la cancha de juego. Sin embargo, no se podrá autorizar la alteración de la envolvente del edificio. Todo ello con la finalidad de asegurar el adecuado funcionamiento y uso del conjunto del edificio, mediante la mejora de sus condiciones de habitabilidad y uso. Tras esta aprobación inicial, el Plan se someterá al correspondiente periodo de información pública antes de su aprobación definitiva.