Tras la expulsión de Fernando Andina, este lunes 17 de octubre volvieron a encenderse los fogones de MasterChef Celebrity. Y lo hicieron de una manera muy romántica: con un esculpido Eduardo Navarrete que, caracterizado como Cupido, se dedicó a hacer matches entre los aspirantes y los platos que debían cocinar, como milhoja de chocolate espumoso, langostino thai o pato, remolacha y arroz. 

Pese a la complejidad de la prueba, la mayoría de los concursantes obtuvo valoraciones muy positivas, a excepción de Isabelle Junot, Nico Abad y Norma Duval. Esta última, además, llevaba el delantal negro desde el programa anterior, por lo que su situación peligraba especialmente.

Por si fuera poco, a la vedette le tocó ejercer la triple capitanía, pues se dividió a los concursantes en tres grupos en la prueba en exteriores, grabada en Madrid Río. Pese al estrés, terminó el desafío sin ningún desencuentro con sus compañeros, algo que sí había ocurrido en prácticamente todos los programas previos y por lo que tanto jueces como aspirantes le habían dicho en varias ocasiones tenía "la piel muy fina".

El menú estuvo diseñado por Verónica, duelista de MasterChef 10, y fue muy saludable, como las recetas que suele hacer la salmantina. Tras las catas, Norma Duval, María Escote, María Zurita, Lorena Castell, Nico Abad, Xavier Deltell y Daniela Santiago, de los equipos azul y blanco, se llevaron los delantales negros.

Por el contrario, el equipo rojo, formado por Manu, Pepe e Isabelle, ganó el desafío.  El aspirante mejor valorado de la prueba fue Manu Baqueiro, que tardó poco en descubrir en qué consistían sus privilegios. 

Ya en plató, el actor tuvo que salvar a un delantal negro y poner a uno de los salvados en su lugar, y optó por salvar a María Zurita, que se mareó en la prueba de exteriores; y poner a Isabelle Junot en su lugar. Eso sí, a esta última le dio el mayor tiempo posible, pues la tercera parte de los privilegios de Baqueiro consistió en decidir cuándo empezaba cada concursante a cocinar, beneficiando a unos y perjudicando a otros.

Los aspirantes tuvieron que hacer la compra sin conocer el ingrediente principal del plato con el que se jugaban la eliminación, que terminó siendo el plátano... y también la gota que colmó el vaso del concurso de Norma Duval. Esta intentó elaborar una propuesta con pimientos que se le quemó y, como sustitución, hizo guacamole (sin cilantro, pues no lo cogió en el mercado) con chips de plátano.

Esto le costó su participación en el programa, pues los jueces afearon tanto que no supiera destacar ni poner en valor el plátano como que presentase algo tan simple pese a haber contado con 40 minutos.

"Me llevo un recuerdo bueno, sobre todo de Jordi Cruz. No cocino tan bien como otros compañeros, pero que yo cocine es un auténtico milagro, pensé que no cogería un cazo jamás. Me llevo una experiencia increíble, pura, difícil y diferente. No hay nada tan duro como algo que no controlas, me he notado muchas veces insegura, pero elijo quedarme con lo bueno. Me gustaría que ganase Isabelle, pero... no os perdáis a María Zurita", dijo la vedette antes de marcharse definitivamente.