Este lunes 19 de septiembre, los restos mortales de la reina Isabel II eran trasladados hasta la Abadía de Westminster tras cuatro días en la capilla ardiente para que los ciudadanos pudiesen acercarse a dar su último adiós a la monarca. A las 11.00 horas (12.00 hora peninsular española) comenzaba el funeral de Estado en una ciudad completamente blindada.
Cerca de 2.000 personas han asistido al funeral, entre ellas miembros de otras casas reales y líderes mundiales, en una ceremonia religiosa oficiada por el deán de Westminster, David Hoyle. Tras un solemne periodo de silencio, sobre las 13.00 horas (14.00 hora peninsular española), el féretro era trasladado hacia el castillo de Windsor.
Descansará junto al féretro de su padre, Jorge VI
La capilla de San Jorge, en el interior del castillo de Windsor, será el espacio en el que reposarán los restos de la monarca, que falleció el pasado 8 de septiembre a los 96 años de edad. En este lugar, la reina será enterrada en la capilla, donde reposan otros diez monarcas y siete consortes, además de otros miembros de la familia real, pero no de la reina Victoria.
Tras una ceremonia más íntima con 800 invitados, el féretro con los restos mortales ha descendido hasta la cripta real, para situarse junto a los restos de Felipe de Edimburgo, que falleció en 2021.
La reina descansará en la Capilla de Jorge VI, su padre. En este espacio se hallan también los féretros del propio Jorge VI, junto a los de la Reina Isabel (la Reina Madre), el Príncipe Felipe y las cenizas de la Princesa Margarita.
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