Hace un tiempo, un hombre australiano de 56 años llamado Simon Dorante-Day se hizo viral en redes ya que él mismo aseguró ser hijo de Carlos III, el actual rey británico.

Debido al fallecimiento de la reina Isabel II, Simon ha querido expresar sus condolencias a la familia real, ya que él la considera su abuela. Además, el hombre le había escrito una carta a la monarca con la esperanza de que algún día llegase a leerla. 

En ella, le expresaba que quería que Carlos III se sometiese a una prueba de ADN para corroborar que son padre e hijo. "El primer pensamiento sobre su muerte fue tristeza. Además, no hay respuesta a la carta que le escribí y esa ventana de oportunidad se ha cerrado", afirma a News 7.

"Pero también, su muerte me ha provocado cierta ira. Porque ella ha estado al tanto de todo esto y ha dejado que sucediera. Sin embargo, de la misma manera, miro hacia el futuro y pienso: 'Bueno, ya no estoy tratando con ella, estoy tratando con él'", declara Dorante-Day.

Asimismo, asegura que, si hace falta, llevará al actual rey a juicio para que le hagan la prueba: "El juez me dijo que si regreso con las pruebas bien selladas, no hay razón para denegar una solicitud para una prueba de ADN, y Carlos y Camilla tendrán que responder eso".

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El australiano comenta que quiere explicaciones al respecto de por qué le abandonaron: "Me deben, como pupilo del estado, como hijo adoptivo, la verdad sobre lo que sucedió y ese es principalmente el factor determinante. Eso es siempre lo que quise", asegura.

Simon Dorante-Day se siente totalmente ignorado por la que, en teoría, es su familia biológica: "Carlos consiguió lo que quería: el trono, su esposa, lo consiguió todo. Ni siquiera entiendo la verdad sobre mi madre. Ahora es el momento de obtener mi final feliz", concluye en sus declaraciones.