Este pasado martes, Alberto de Mónaco decidió visitar nuestro país para conocer de primera mano la historia de la evolución humana. Lo hizo con una escapada privada a los yacimientos de Atapuerca, en Castilla y León, mientras que su esposa, la princesa Charlène de Mónaco, se quedó en el Principado continuando con su agenda.

Precisamente la fecha que ha elegido el soberano monegasco no es baladí, ya que este 26 de julio se cumplían 23 años desde que se constituyese la Fundación de los yacimientos, lugar en el que ha sido recibido por los codirectores del Proyecto Atapuerca y vicepresidentes de la Fundación, los arqueólogos Juan Luis Arsuaga y Eudaldo Carbonell, tras aterrizar sobre las 11.00 horas en el aeropuerto burgalés de Villafría, donde estaba desplegado un amplio equipo de seguridad.

Ha sido con dichos maestros con quienes más tarde se ha dirigido para conocer de primera mano los yacimientos de El Portalón de Cueva Mayor, donde ha podido observar la Galería de las Estatuas y la Galería del Sílex, para más tarde dirigirse a la Sima del Elefante, precisamente donde este 2022 ha aparecido la cara más antigua hallada hasta la fecha en el oeste de Europa, y acabar con la Cueva Fantasma.

Asimismo, luego ha firmado el libro de honor de la Fundación Atapuerca y ha conocido tanto el Museo de la Evolución Humana (MEH) como el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) de Burgos, en un día en el que no le acompañó nadie de su familia, aunque ha asegurado que le gustaría volver con ellos.

Porque su mujer, la princesa Charlène, y sus hijos, los mellizos Jacques y Gabriella, se han quedado en Mónaco. De hecho, mientras su marido estaba en España, Charlène ha continuado con su agenda y ha reaparecido en solitario con una visita la residencia A Qietüdine, donde ha podido conocer de primera mano las instalaciones y charlar animosamente con residentes y con los empleados.

El príncipe Alberto, gran aficionado a la arqueología, ha asegurado que los yacimientos de Atapuerca hacen posible que "se pueda reconstruir toda la historia del pueblo de Europa y cómo era en tiempos prehistóricos", así como que le ha encantado conocerlo porque es "uno de los sitios más completos e interesantes", resaltando siempre la "importancia de encontrar todos los restos posibles" para conocer mejor la historia.