No llevamos ni una semana del mes de julio y Ricky Martin ya sabe que está siendo el peor mes de todo este 2022. Comenzó siendo señalado por violencia doméstica por alguien anónimo -que según el hermano del cantante sería su sobrino, que tiene problemas mentales, aunque esto no está confirmado-, a lo que siguió la emisión de una orden de restricción en su contra. Luego, sus excompañeros de la boyband Menudo sacaron a la luz los abusos sexuales que vivieron dentro del grupo...

Y la gota que ha colmado el vaso ha sido la demanda que le ha interpuesto en un tribunal de Los Ángeles, en California, Rebecca Drucker, quien fuera mánager del boricua de 2014 a 2018 y de 2020 a este mismo 2022. Le reclama ni más ni menos que tres millones de dólares (alrededor de 2.900.000 millones de euros), tal y como han explicado desde The New York Post.

Según la representante, ese es el dinero que se le debe en comisiones impagadas. Pero no solo eso, sino que quien fuera su mano derecha asegura que hubo de proteger al autor de éxitos como La bomba, La mordidita o Livin’ la Vida Loca de sus propias "imprudentes indiscreciones", según los documentos, al que han accedido varios medios norteamericanos.

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"Lo hizo no solo porque fuera su mánager, sino también porque pensaba que el señor Martin era un buen amigo", se lee en el escrito que han presentado los abogados de Drucker, quienes agregan que su cliente dejó su trabajo por el ambiente "tóxico" en el que desempeñaba su cargo y del que alguna que otra vez intentó hablar con el artista.

De hecho, menciona un incidente "particularmente feo" en Dubái, en 2018, en el que también están involucrados Martin y José Vega, su coreógrafo y mano derecha, como la razón de su primera renuncia. Según Drucker, él le debe el haber salido adelante en un mundo de "contratos de grabación, giras y acuerdos de patrocinio, y otros esfuerzos profesionales" cuando precisamente él estaba pasando un "período de caos" personal.

Más tarde, tras la insistencia de Ricky Martin, ella accedió a darle "otra oportunidad", también porque ella asegura ser testigo de episodios que pudieron haber acabado con la carrera del astro puertorriqueño, que ya experimentó la amenaza de un prestigioso abogado que le amenazó con arruinarle la vida. Entuerto del que le salvó la exmánager con una denuncia que nunca vio la luz.

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Sin embargo, se lee en la demanda, Drucker descubrió que la vida del artista estaba "desordenada". "Aunque la carrera de Martin fue fructífera desde que volviese a contratar a Rebecca como su gerente en mayo de 2020, ella se vio obligada a capear una ristra de problemas personales de Martin, como el que tuvo con la niñera contratada para cuidar a sus hijos por no pagar sus impuestos o el que tuvo por abuso de sustancias, entre otros asuntos", escriben los abogados sin entrar en más detalles.

Como las comisiones de Drucker, según estipula la demanda, se vieron beneficiadas por un aumento de sueldo hecho en 2021 (del 5 al 10%), que ahora se niegue a pagarle le parece hecho "total y maliciosamente" por parte de Martin. "Con Rebecca a su lado, Martin ganó millones de dólares y, por lo tanto, le debe comisiones sustanciales", aseguran los abogados.

Por último, la demanda incluye un apartado en el que habla de cómo Martin ha llegado a amenazar a Drucker, buscando que firme un acuerdo de confidencialidad "para silenciarla sobre el mal comportamiento de Martin que haya presenciado y soportado a lo largo de sus años juntos". El equipo legal del cantante no se ha pronunciado.