Siete meses después de que saltara a la luz la relación de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia, y del posterior comunicado de los exduques de Palma en el que anunciaban el fin de sus 25 años de matrimonio, Cristina de Borbón ha hecho borrón y cuenta nueva.

En mayo, la revista Semana sorprendió a la infanta disfrutando de su círculo de amigos, entre los que se encuentran el actor Antonio Resines y la mujer de este, Ana Pérez-Lorente.

Según detalló la publicación, Cristina había vuelto a España, a Madrid concretamente, dejando atrás, al menos por una temporada, su refugio en Ginebra. De esta forma, ha retomado su vida social, "libre y feliz" cuenta la revista.

Las imágenes en la playa que confirman que Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia siguen juntos tras superar una crisis

Según relata la revista, la infanta ha aprovechado su estancia en la capital para conectar de nuevo con amigos y familiares. Así, y tal y como muestran las fotografías, la infanta acudió a una fiesta de cumpleaños en la casa de un matrimonio amigo. Entre los invitados llamó la atención la presencia de Resines.

Pero no solo ha potenciado su vida social. Cristina también ha cambiado físicamente. Así lo asegura la revista Lecturas, que este miércoles hace un repaso al nuevo físico de la hermana del rey Felipe.

Un aspecto mucho más rejuvenecido y con un físico más esbelto, cuenta la publicación. Al poco de separarse, dice Lecturas, se apuntó al gimnasio, al que acude tres veces por semana.

Pero lo que más llama la atención es que, incluso, se ha quitado la verruga tan característica que tenía cerca de la nariz.