En las últimas semanas, el aumento de la incidencia del coronavirus en la Comunidad de Madrid está provocando que la gente empiece a ponerse nerviosa en plenas fechas veraniegas. Sin embargo, el Gobierno regional ha señalado este martes que esta semana se está produciendo una "ralentización" y que no considera necesario "reabrir el Zendal" ni volver al uso de mascarillas en interiores porque "tendría poco efecto pese a la séptima ola de Covid".

Así lo ha explicado el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, a los medios de comunicación en su visita al Hospital Universitario Infanta Leonor, donde ha reiterado que los datos apuntan ya a que se ha alcanzado "el pico de contagios" de esta ola y, en esta línea, se espera que no aumenten los casos en los próximos días.

"Tiene menos sentido si únicamente es el centro de trabajo y luego en el resto de la actividad diaria no se utiliza la mascarilla", ha detallado Escudero, que ha apostado por seguir manteniendo las medidas establecidas actualmente en cuanto a protección de vulnerables y en espacios sanitarios. 

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Además, ha sostenido que la incidencia acumulada en mayores de 60 años, el grupo con más vulnerabilidad, está en 1.680 casos por cada 100.000 habitantes. A nivel asistencial, ha indicado, hay un total de 2.320 pacientes ingresados y 86 en UCI, "una cifra muy por debajo de otras olas", ha recordado, descartando así que sea necesario derivar al Hospital Enfermera Isabel Zendal. "Los hospitales de Madrid están dando esa respuesta, excepto en algunos casos puntuales", ha concretado.

Un 65% menos de ingresos

En esta línea, el consejero madrileño ha compartido la "buenísima" definición del viceconsejero, Antonio Zapatero, de 'Covid-22' para definir la situación actual, ya que "nos enfrentamos a un Covid completamente distinto" marcada por la aparición de los sublinajes de ómicron BA.4 y BA.5, mucho más contagiosos.

"Cada vez que va llegando una nueva variante va complicando el control de la pandemia, pero la buena noticia, desde el punto de vista asistencial o clínico, es un dato muy claro: comparado con el verano anterior, hay un 65% menos de personas ingresadas", ha subrayado Escudero, que en cualquier caso ha subrayado que no hay que bajar la guardia porque la Covid "sigue entre nosotros".