La mayoría de motoristas de Barcelona se saltan a la torera la normativa a la hora de aparcar en la acera, según denuncia un estudio que han impulsado las entidades Catalunya Camina, que defiende los derechos de los peatones, y Eixample Respira, que reivindica la mejora de la calidad ambiental. El informe, realizado a partir de la observación de 6.500 motos, señala que 3.600 estaban estacionadas sobre el espacio peatonal, y de estas, un 89% (3.200) de forma incorrecta.
Emeka Okpala, presidente de Catalunya Camina, ha considerado este martes que estos datos muestran "una preocupante realidad que sufre la ciudad". En este sentido, ha lamentado que el incumplimiento de las normas de estacionamiento en las aceras "genera problemas de accesibilidad, sobre todo, entre personas con movilidad reducida".
La investigación, que analizó entre marzo y mayo un 3% del parque total de motos de la capital catalana en horario de oficina, apunta que diariamente aparcan mal sobre el espacio peatonal unas 90.000, que ocupan 260.000 metros cuadrados. Sin embargo, se les imponen solo alrededor de "13 multas al día".
Ante esta situación, Catalunya Camina y Eixample Respira reclaman "modificar la normativa para prohibir terminantemente estacionar en la acera", lo que liberaría "26 hectáreas de espacio", afirma el estudio. Este cuenta con el apoyo de la Federació d’Associacions Veïnals de Barcelona (FAVB), la Associació per a la Promoció del Transport Públic (PTP), la Associació de Prevenció d’Accidents de Trànsit, la Plataforma per la Qualitat de l’Aire y Andando (coordinadora estatal de asociaciones de peatones).
El informe muestra, asimismo, que en las calles observadas (se recorrieron 30 kilómetros de vías, alrededor del 2,2% del total de la capital catalana), hay una moto mal aparcada cada 7,9 metros.
El Eixample es el distrito donde es más habitual que las que estacionan sobre la acera incumplan la normativa y las de 'sharing', "en su mayoría", aparcan correctamente en la ciudad.
Por otro lado, el estudio apunta que cuando se detecta un vehículo de este tipo mal estacionado en el espacio destinado a los peatones, "en la mayoría de los casos" hubiera sido fácil no infringir las normas. Y es que existen plazas a menos de 100 metros disponibles sobre la acera para aparcar correctamente, y en calzada -donde se acata mucho más la normativa-, el 30% están vacías.
"La creación de más de 8.500 nuevas plazas de estacionamiento en calzada (entre 2020 y 2021) no ha servido para mejorar el civismo significativamente", lamenta el informe, en el que las entidades piden habilitar una cantidad mayor. También reclaman más espacios para motos en parkings subterráneos. Con estas dos medidas, creen que se podría prohibir que aparcaran sobre la acera.
Otra de las peticiones de las asociaciones es el pago de una tasa por estacionar las motos en el espacio público. En el estudio señalan que esta medida ya se aplica en ciudades como Palma de Mallorca o París, capital europea, en la que se cobra "tres euros por hora a no residentes y 1,5 euros al día a residentes". "Para Barcelona, proponemos una tasa inicial de 1,5 €/día (45 €/mes) para las motos censadas en la capital catalana y de 4 €/día (80 €/mes) para las que provengan de otros municipios", apuntan.
Otras propuestas son "que se haga cumplir la normativa vigente de inmediato" o que se mejore "la infraestructura y la oferta actual de movilidad activa (tanto a pie como en bici)".
La ordenanza
De acuerdo con la ordenanza de vehículos y peatones, cuando no hay posibilidad de aparcar en la calzada y siempre que la señalización no lo prohíba, las motos pueden estacionar en las aceras si estas tienen más de tres metros de ancho y se cumplen una serie de condiciones.
En aquellas de entre tres y seis metros de anchura se debe hacer en paralelo a las mismas y a más de medio metro de su límite, sin entorpecer el acceso a contenedores, papeleras o parkings. En aceras de más de seis metros, en cambio, la ordenanza establece que hay que estacionar en semibatería y que tienen que quedar un mínimo de tres metros sin obstáculos para el paso, como por ejemplo terrazas de bares.
Según el informe, en 2021 estaban registradas en Barcelona 220.656 motocicletas y 49.341 ciclomotores. Las plazas de aparcamiento en calzada para estos vehículos eran 77.899, indican datos municipales.
Las motos, señala el estudio, están implicadas en el 50% de los accidentes de tráfico que tienen lugar en la capital catalana y tienen una alta tasa de mortalidad: en lo que va de 2022, el 90% de los fallecidos en estos siniestros han sido motoristas.
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