Dos de las principales patronales catalanas han reaccionado a la fijación de un precio máximo para el gas por parte de la Comisión Europea. Este organismo ha fijado un límite del precio del gas en 50 euros/MWh durante un año, que se traducirá en una rebaja en la factura de la electricidad. Ambas organizaciones empresariales ven esta medida como algo positivo para la competitividad de las empresas, pero también matizan que se necesitan medidas más profundas y a largo plazo.

La patronal Cecot ha pedido "medidas estructurales" al Gobierno en materia de energía al margen de la medida aprobada por la Comisión Europea. El director de la Oficina para la Transición Energética, OTE, de la organización empresarial, Josep Casas, ha abogado para que con ello se "evite volver a la situación vivida en los últimos tiempos" y ha instado a que se tengan en cuenta todos los agentes económicos y sociales a la hora de plantear estas medidas especiales, ha informado en un comunicado.

Por su parte, la patronal de la pequeña y mediana empresa, Pimec, ha definido el acuerdo para limitar el precio del gas como "una gran oportunidad para dar competitividad al tejido productivo", según un comunicado emitido. Sin embargo, también ha exigido que el tope "no sea temporal" y que se cambie el modelo de fijación de precios de la electricidad excluyendo al gas natural del sistema.

Asimismo, ha reclamado que se tramite lo antes posible el decreto ley que aplique el nuevo precio del gas, que en sus palabras "mejorará el estado crítico de pequeñas y medianas empresas", para lo que ha pedido que se "dejen a un lado los intereses partidistas".

Medidas complementarias

Josep Casas, de Cecot, ha aplaudido el anuncio de la CE pero ha lamentado que, a pesar de la limitación del precio del gas, el importe de la electricidad estará "lejos" de la media de precios de los últimos cuatro y cinco años, que según él se situará entre los 120 euros/MWh y los 130 euros/MWh, cuando antes oscilaba sobre los 45 euros/MWh.

El experto de Cecot, Josep Casas, ha apostado por "evitar volver a un mercado de oligopolio" y ha subrayado la importancia de evitar las pérdidas de las compañías mientras se avanza hacia la descarbonización de la economía.

Por su parte, en su comunicado, Pimec ha pedido al Gobierno y a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, CNMC, que estén "atentos a los movimientos especulativos que pueda hacer el oligopolio de generación eléctrica", especialmente en las ofertas de casación de las centrales hidráulicas de embalse, es decir, la fijación del precio del MW/h de cada hora en función de la producción.