Los jóvenes europeos tienen bastante claros los principales retos a los que se enfrenta la Unión en los próximos años: cambio climático, cuestión migratoria, desempleo y desigualdad. Así se desprende del Eurobarómetro especial sobre el futuro de Europa publicado esta semana. Entre todas, el problema del clima ocupa la primera línea, pues el 91% de los jóvenes de entre 15 y 24 años opina que solucionar este problema podría mejorar la salud y el bienestar de los ciudadanos. La Conferencia sobre el Futuro de Europa (CoFoE) se ha convertido en la plataforma perfecta para abordar estos objetivos.

Al menos ocho de cada diez europeos piensan que varios retos medioambientales son muy o "bastante importantes" para ellos personalmente. En particular, más de la mitad (58%) dice que restaurar los bosques, suelos, humedales y turberas de Europa para aumentar la absorción de la contaminación por CO2 es "muy importante".

Alrededor de la mitad (49%) cree que es "muy importante" aumentar la proporción de energías renovables en la economía europea y tener una mayor eficiencia energética para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. La renovación de los edificios para que utilicen más energía renovable y para que sean más eficientes energéticamente es vista como "muy importante" por el 46% de los europeos.

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Casi nueve de cada diez europeos (87%) están de acuerdo en que la lucha contra el el cambio climático puede ayudar a mejorar su propia salud y bienestar. El 85% está de acuerdo en que la lucha contra el cambio climático puede crear nuevas oportunidades de innovación, inversión y el 83% está de acuerdo en que abordar el cambio climático ahora puede ayudar a reducir los costes de un mayor daño ecológico en en el futuro.

Hay menos consenso en cuanto al impacto en la economía: mientras que el 47% está en desacuerdo con la afirmación de que la lucha contra el cambio climático puede perjudicar a la economía, una proporción similar (45%) está de acuerdo con ella.

España se sitúa a la cabeza de los países europeos en los que se apunta al desempleo como el principal reto para el futuro del bloque de los 27, una posición que comparten el 61% de los encuestados, seguido del 52% de Grecia y que contrasta con el 9% de Holanda. Además, los encuestados españoles son los que han mostrado más insatisfechos con su empleo actual, un 52% frente al 33% de la media comunitaria. El Eurobarómetro pone de manifiesto que el 81% de las ciudadanos es feliz viviendo en la UE y el 68% opina que la UE es un "remanso de estabilidad en un mundo de crisis".

Las desigualdades sociales, el desempleo y la migración figuran como otros de los desafíos más mencionados por los europeos, con un 36%, un 32% y un 31%, respectivamente. Mientras, el cambio climático y el medioambiente se encuentran en un lugar destacado y han sido mencionados por el 32% de los encuestados.

Además, los europeos consideran el respeto de la UE por la democracia, los derechos humanos y por el Estado de derecho, como el principal activo de la UE, según el 27% de los encuestados, seguido de su poder económico, industrial y comercial, para el 25% de los europeos consultados.