Mata a su mujer y se suicida en el interior de su panadería en Algaranejo

  • Fuentes de la investigación encontraron al hombre con un disparo en la cabeza junto a la escopeta.
  • Mató a su mujer de 50 años con un arma blanca.
  • Sería el segundo caso de violencia de género en lo que va de año.
Agentes de la Guardia Civil salen de una vivienda en Fuentes de Cesna, pedanía de Algarinejo (Granada).
Agentes de la Guardia Civil salen de una vivienda en Fuentes de Cesna, pedanía de Algarinejo (Granada).
EFE
Agentes de la Guardia Civil salen de una vivienda en Fuentes de Cesna, pedanía de Algarinejo (Granada).
Un hombre mata a su mujer y después se suicida en el municipio granadino de Algarinejo.
EFE

La Guardia Civil investiga un caso de violencia de género ocurrido en el municipio granadino de Algarinejo, tras localizar los cadáveres de un matrimonio en el interior de la panadería que ambos regentaban, en la pedanía de Fuentes del Cesna.

Una trabajadora del establecimiento alertó a la Guardia Civil a las 06.00 horas de este martes, cuando localizó el cuerpo de María -50 años-, en el suelo con heridas de arma blanca. En el interior del establecimiento también fue hallado Antonio, el marido de 48 años, que se habría disparado en la cabeza después de asesinar a su mujer, según ha informado el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández.

Fuentes cercanas a la investigación han señalado a Efe que el hombre tenía un disparo en la cabeza y que junto a él había una escopeta. Las mismas fuentes han precisado que las diligencias practicadas apuntan a un posible caso de violencia machista en el que el hombre habría matado a su mujer antes de suicidarse.

Tanto la Guardia Civil como el alcalde de Algarinejo, Jorge Sánchez, han apuntado que no existen antecedentes de denuncias o violencia machista entre el matrimonio.

Si se confirma que se trata de un nuevo asesinato machista, se trataría de la segunda víctima mortal de la violencia de género este año, elevando a 1.127 el número de mujeres muertas a manos de sus parejas o exparejas desde 2003, cuando comenzaron los registros.

La primera víctima mortal del año se registró en Tudela (Navarra). Sara Pina, profesora de 38 años, fue asesinada el 8 de enero presuntamente por su marido, detenido posteriormente en Francia.

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