Este jueves 9 de diciembre, Telecinco emitió una de las últimas entregas de Secret Story: la casa de los secretos. La gala, presentada por Jorge Javier Vázquez, albergó la expulsión de Julen de la Guerra, algo que él mismo se esperaba al prever que los seguidores de varios de los concursantes centrarían sus votos en él.

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Esto deja una semana más en la casa a Luis Rollán, que se enfrentaba a la sala de expulsión por primera vez. Tras la controvertida nominación del pasado jueves, cuando los concursantes se dividieron en parejas y eligieron quién era inmune y quién se salvaba, terminando siendo los Gemeliers, Luis Rollán, Julen de la Guerra y Luca Onestini los candidatos para abandonar el formato. Sin embargo, el italiano y los cantantes fueron salvados el martes, en la gala presentada por Carlos Sobera.

De la Guerra deja un vacío enrome en la casa después de que concursantes como Luis Rollán y los Gemeliers dijeran que era su favorito. Pero si alguien lo pasará mal será Sandra Pica, su novia, que poco antes de saber que el madrileño sería expulsado explicó, emocionada, que había aprendido lo que era el amor gracias a él: algo que, lejos de doler, hace feliz a la gente.

Al saberse fuera del concurso, el madrileño le encomendó a Luis Rollán que cuidara a su chica y que evitara que le afecten las posibles provocaciones de Cristina Porta, su gran enemiga. Sobre ella, dijo también Julen que era la única persona de los 18 concursantes con la que no mantendría la relación en el exterior.