Tamara Falcó cumple este sábado 40 primaveras tras haber soplado las velas a las 0:00 horas de este 20 de noviembre acompañada de sus seres más queridos en su fiesta de cumpleaños, que comenzó en la noche del viernes. La marquesa de Griñón llegó al evento acompañada de su novio, Íñigo Onieva, de quien está muy enamorada.
Hace apenas un mes que festejaron un año de un amor que cada día es más fuerte y Falcó no quiso dejar pasar su día especial para declararse una vez más a su chico, para el que solo tiene bonitas palabras. "Íñigo me da estabilidad. Es una persona sólida. Hay tanta gente que te promete el oro y el moro y luego...", publicó la diseñadora este viernes en sus historias de Instagram, unas declaraciones que hizo en una entrevista con Vogue y que ha recogido Semana.
Las rumores empiezan a apuntar cada vez con mayor fuerza hacia una posible boda de la pareja, aunque ella expresó el pasado mes de agosto en la revista ¡Hola! su deseo de ir "poco a poco" porque "se tarda mucho en conocer a una persona", aunque reconoció que está en su mente pasar por el altar.
Mientras tanto, lo que sí se permite Falcó es soñar con el momento del enlace. Le gustaría que fuera una "gran boda", pero solo rodeada de "la gente que más quieres y con los que te lo pasas fenomenal", por lo que no cree que apostase por una ceremonia "gigantesca", explicó en El hormiguero.
Su familia, por su parte, estaría encantada con la noticia, tal y como ha confesado este jueves su hermana Xandra: "Estamos deseándolo todos", ha asegurado la primogénita de Carlos Falcó al ser preguntada por una posible boda.
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