El titular del Juzgado de Instrucción número 42 de Madrid, Juan José Escalonilla, ha acordado el peritaje de los trabajos que prestó la consultora Neurona a Podemos y por los que el partido pagó 360.000 euros. Estos servicios de consultoría y materiales audiovisuales son objeto de investigación desde hace meses. El magistrado dudó inicialmente de que esos trabajos existieran, y tras realizar diligencias que corroboran ese extremo, quiere ahora saber si pudo haber sobrecostes.

Según consta en un auto fechado el pasado 12 de noviembre al que ha tenido acceso 20Minutos, el juez concertó  "la práctica de una pericial" que midiera el precio de los servicios prestados por los trabajos de Neurona en aquella campaña electoral. Dichos archivos son 48 vídeos para su publicación en la red social Facebook y otros tantos diseños "consistentes en imágenes físicas y digitales para la campaña electoral de la coalición Unidas Podemos", además de trabajos de consultoría.

El informe que marque el precio real de los trabajos será llevado a cabo por un diseñador gráfico y un técnico de realización de vídeo, aunque este último trabajo podrá realizarlo una empresa cuya actividad social comprenda la edición de vídeos y que haya participado en campañas electorales. 

El juez duda de la cobertura de actos electorales

En el auto, Escalonilla acordó también que se analizara la cobertura de siete actos electorales llevados a cabo por Podemos en aquellos comicios. No obstante, puso en duda que los trabajadores de Neurona realizaran dicha cobertura pese a que el contrato que firmó el partido con la consultora en febrero de 2019 contemplaba la cobertura de actos electorales.

El magistrado aseguró que "cabe tener por indiciariamente acreditado" que Neurona no prestó dicho servicio, "llevado finalmente a efecto por empleados de dicho partido o terceras personas contratadas para tal fin". "Únicamente realizaron la cobertura de actos de dicha campaña electoral cuando por falta de medios personales del partido político Podemos resultó necesario que alguno de los trabajadores contratados por Neurona se desplazara a dichos actos", se puede leer en el auto.

Con todo, el juez sí da constancia del resto de trabajos. Cabe recordar que en un primer momento se investigó si los mismos llegaron a prestarse o si fueron simulados. Para demostrarlo, Podemos entregó al juez más de 1.400 documentos para probar que los servicios se prestaron y facilitó una lista de trabajadores de Neurona que declararon como testigos en el juicio para acreditar que sí se prestaron los servicios.