La Policía Nacional ha desplegado este lunes un gran dispositivo para desalojar el edificio que albergaba el Centro Social Okupado La Traba, situado en el Paseo de Delicias número 51 del distrito de Arganzuela. 

Los portavoces del colectivo han explicado a 20minutos que, ante el ingente despliegue policial, más de una veintena de furgonetas de la UIP, el colectivo ha decidido no oponerse al desalojo y ha entregado las llaves a la Policía a cambio de que sus miembros no fuesen identificados.

Desde antes de las 7.00 horas, el operativo policial ya estaba desplegado en la zona para desalojar este antiguo cine en el que se instaló este colectivo social después de que fuese desalojado en 2014 de las naves industriales de Batalla de Belchite. 

En previsión de un nuevo desalojo, La Traba había convocado para las 8.00 horas una "chocolatada sin porras" en el centro social con el fin de defender el espacio. Al estar blindado el edificio, la protesta pacífica se ha trasladado a la cercana plaza Jardín de Palestina, donde se han reunido más de medio centenar de personas. Pasadas las 9.30 horas, el colectivo desconvocaba la concentración pacífica con cánticos de: "La Traba vive, la lucha sigue" y "Con La Traba ni pudieron ni podrán". 

A. L.

Desde La Traba han lamentado esta situación y han explicado que se trata del centro social "más activo del centro de Madrid" con multitud de actividades culturales en marcha. En los últimos meses han organizado conciertos, talleres, espectáculos de ballet y un estudio de grabación. Al parecer, el edificio es propiedad del fondo de inversión Talal Investments, que habría estado presionando en los juzgados para forzar el desalojo, según ha denunciado este colectivo. La sospecha de los okupas es que en el lugar del antiguo cine ahora "construirán viviendas de lujo".

Con dos desalojos ya a sus espaldas, el colectivo defiende que "La Traba es algo más cuatro paredes. Es un punto de encuentro para los vecinos y vamos a buscar otro espacio donde poder seguir desarrollando nuestras actividades", según ha declarado uno de sus portavoces. 

Tras el desalojo de este edificio, en la ciudad de Madrid quedan al menos dos centros sociales similares: La EKO de Carabanchel y La Animosa de Hortaleza.