O en la acera o en la calzada, pero que una terraza ocupe ambas a la vez, no. Esta es la principal reclamación de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB), que ha anunciado que este martes ha presentado alegaciones a la propuesta de modificación de la ordenanza de veladores que ha impulsado el Ayuntamiento. Esta pretende consolidar el modelo de terrazas que nació a raíz de la pandemia y que permitió que las que estaban en la acera crecieran sobre la calzada y también que locales que no tenían mesas en el exterior las instalaran en el espacio tradicionalmente destinado a los coches.

Los vecinos piden, asimismo, que lo que ocupan las terrazas en la calzada no supere en ningún caso el 20% de lo que correspondía a plazas de aparcamiento antes de la llegada de la Covid en una determinada zona. Pretenden así que el número de veladores no crezca de forma excesiva, pues según Ana Menéndez, presidenta de la FAVB, la modificación de la ordenanza "abre la puerta a un aumento imprevisible". 

Menéndez, además, ha apuntado que no entienden que en Barcelona se quiera consolidar las ampliaciones de terrazas "extraordinarias" por la pandemia "cuando en otras ciudades las están retirando". También ha criticado que el espacio ganado a los coches no se destina a los vecinos, sino a "ampliar el negocio privado de la restauración".

Las asociaciones vecinales, asimismo, exigen que los veladores no se puedan ubicar en chaflanes -puesto que son espacios reservados a menudo para la carga y descarga u otros usos-, ni en paseos, ramblas, plazas o calles "ya saturadas" de estas instalaciones.

También reclaman que el aforo máximo en las terrazas nunca pueda ser superior al 50% del que hay en el interior del local. En este sentido, Menéndez ha denunciado que en el paseo de Sant Joan, por ejemplo, hay bares y restaurantes pequeños con "hasta 20 mesas" en el exterior.

Con esta medida, además, creen que se reducirían las calles con mucha acumulación de mesas fuera, como por ejemplo Enric Granados. Josep Maria Alcoberro, de SOS Enric Granados, ha señalado que sorprende que "el Ayuntamiento técnicamente más progresista de la historia esté impulsando una política de terrazas totalmente contraria a los intereses vecinales y a favor de los lobbies económicos".

Otra reclamación de los vecinos es un informe de la Agencia de Salud Pública sobre la afectación en la salud de las terrazas en la calzada y otro que analice su impacto sobre el espacio público y la economía de la ciudad.

Pere Mariné, vocal de Urbanismo de la FAVB, ha lamentado que la modificación de la ordenanza dé "pie a ampliar el número de mesas" cuando Barcelona tiene "una de las tasas más altas por habitante de España". Según datos del consistorio, ha dicho, hay unas 25.000 mesas con licencia ordinaria y 10.000, con una extraordinaria.

La FAVB considera, por otro lado, que el procedimiento de modificación de la ordenanza de terrazas se tendría que considerar 'nulo', puesto que sostiene que se ha hecho sin el impulso inicial de la Comisión Técnica de Terrazas -de la cual forma parte- y sin el preceptivo comunicado a los interesados del periodo de consulta pública.

Asimismo, cree que se debería redactar una ordenanza nueva en vez de modificar la existente. Y es que considera que además de los artículos que se cambiarán, sería necesario transformar otros referentes a otros aspectos.

Por ejemplo, señala que las estufas en calzada se tendrían que prohibir por su "evidente peligrosidad" y que los horarios de las terrazas se deberían reducir en dos horas. Según esta propuesta de la FAVB, habría que recogerlas a las 22 horas de domingo a jueves y a las 23 horas los viernes y las vigilias de festivos, porque provocan "afectaciones por ruido" y son "incompatibles con el descanso de los vecinos". La federación también defiende aumentar las cuantías de las sanciones y que no haya renovaciones automáticas de licencias en caso de reiterados incumplimientos.

Los vecinos han presentado las alegaciones el último día en que era posible hacerlo. La previsión es que la modificación de la ordenanza se vote en el pleno del Ayuntamiento antes de finales de año, para que entre en vigor el 1 de enero de 2022. Menéndez ha apuntado que ERC les ha comunicado "que votará en contra".

Fuentes municipales han indicado que las alegaciones "se recopilarán y analizarán". También han recordado que la propuesta recoge que las terrazas en calzada surgidas durante la pandemia se podrán consolidar sobre plataformas, mientras que si hay nuevas peticiones para ampliar o instalar veladores, "habrá que mirar si pueden cumplir todos los criterios y requisitos de la ordenanza".

Los restauradores: "La ciudadanía da la espalda a la FAVB"

El director del Gremio de Restauración de Barcelona, Roger Pallarols, ha señalado que la posición de la FAVB es "respetable, pero claramente minoritaria" y que la federación  "se representa a sí misma y no puede autonombrarse representante de los vecinos".

"Tienen como modelo una ciudad paralizada y pandémica, pero la ciudadanía les da la espalda", ha afirmado. En este sentido, ha explicado que cuando el gremio impulsó en 2018 una iniciativa ciudadana que defendía una mayor libertad para instalar terrazas, recogió 5.000 firmas más de las requeridas en la mitad del plazo que había para ello. La Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona, que impulsó otra "antiterrazas", ha señalado, no llegó a reunir las firmas necesarias ni con una prórroga.

"Solo hace falta dar una vuelta por las terrazas de Barcelona para darse cuenta de que la ciudadanía no apoya a la FAVB", ha dicho Pallarols, que ha lamentado que no velen por la recuperación económica.

Respecto a los horarios, ha rechazado que se reduzcan, porque "Barcelona es la capital de provincia catalana que los tiene más cortos" y porque en ciudades como Madrid "los veladores están abiertos hasta las dos de la madrugada".