Amenaza con volver en un vídeo promocional que ha colgado en su canal de YouTube. Una plataforma en la que Antonio David Flores ya tiene cerca de 15.000 seguidores y mediante la que pretende recuperar posicionamiento mediático y explicarse, pues, salvo sus declaraciones a Federico Jiménez Losantos y a los también youtubers Javi Oliveira y Juanjo Menéndez, poco o nada se ha sabido de él en los últimos tiempos.

Aunque se desconoce cuál es el objetivo del desembarco en el cibermundo, todo hace sospechar que el ex guardia civil desmontará a través de sus vídeos las informaciones o teorías que se difunden sobre él. Esta nueva aventura tiene, a priori, cierto sabor a vendetta.

Sería una equivocación casi criminal que fuera repetición o seguidilla de aquel Rodríguez Menéndez que, cansado de estar de boca en boca, se autoeditó una revista (en la que David trabajó a tiempo parcial) para imaginar sobre el papel fantasías sobre los que creía enemigos. Descarriló.

Dicen que Antonio David está tranquilamente endiosado después de sus primeras victorias judiciales y espera prosperar en la red donde últimamente proliferan canales de corte rosa. Parece que lo que antes se lidiaba en televisión empieza a ser guerra en lo virtual.

Y mientras Antonio David pinta el croma con la marea azul, Rocío Carrasco continúa con las grabaciones del documental En el nombre de Rocío que, según ha podido saber 20minutos, se empezará a emitir antes de diciembre en Telecinco. No estará sola. Como novedad principal, Rocío estará acompañada por personas importantes y claves en la vida de su madre –a algunos los ha contactado personalmente– y cuyos testimonios servirán para esclarecer los puntos más controvertidos, polémicos o enigmáticos de su vida.

Habrá sorpresas, campanazos y confesiones totalmente inesperadas. El otoño dejará demasiadas hojas caídas y tal vez alguna herida abierta. Eso sí, Carrasco tiene el convencimiento de estar haciendo lo correcto y asegura que no incumplirá, bajo ningún pretexto, los deseos o mandatos de su madre.