Así lo ha manifestado Martínez durante su discurso en este acto donde además de condecorar a agentes del Cuerpo de la Policía Nacional, también se ha galardonado a personas ajenas al mismo por su "inestimable ayuda", que subrayó ha sido "fundamental" para el desarrollo de la labor policial.

En el acto, celebrado en Expomeloneras, en San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria), y en el que también se ha rendido homenaje a los agentes caídos en servicio, han estado el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, así como la alcaldesa de San Bartolomé de Tirajana, Concepción Narváez Vega; la subdelegada del Gobierno en Las Palmas, María Teresa Mayans -ya que el delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, se encuentra en La Palma con motivo de la erupción del volcán-; y el teniente coronel, jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Las Palmas, Carlos Rodríguez Baturone.

Martínez ha tenido un recuerdo, en sus primeras palabras, a los ciudadanos de la isla de La Palma, donde ha señalado pudo constar en primera persona los "terribles efectos del volcán en cientos de casas y familias", al tiempo que ha puesto en valor el trabajo realizado por los agentes desplazados a la 'isla bonita' donde "han dado lo mejor de sí mismos para ayudar a los damnificados".

Por otro lado, ha agradecido el trabajo que realizan diariamente los 4.000 agentes que la Policía Nacional tiene en Canarias, así como el llevado a cabo por los 85 que se jubilan y a los 540 nuevos efectivos que han optado por esta "noble pero difícil profesión".

Así, ha señalado que en estos tiempos llenos de "retos y desafíos", el Cuerpo policial ha modernizado sus instalaciones inaugurando la Comisaría del Distrito Centro de Las Palmas de Gran Canaria, incrementando la flota de vehículos y mejorando el equipamiento de todos los agentes para seguir afrontando su misión: la de "ser útiles, proporcionar seguridad para que todo funcione" en relación al sistema de derechos y libertades, la economía y la convivencia pacífica.

LOS ÚLTIMOS DESAFÍOS

Durante su discurso Martínez se ha referido a los últimos desafíos afrontados en este año, entre los que evidentemente ha citado la pandemia del coronavirus, una crisis sanitaria donde la Policía Nacional "ha dado lo mejor para garantizar la seguridad pública y ayudar a los ciudadanos".

En relación con ello ha agradecido la labor desarrollada por todos los profesionales sanitarios, al tiempo que ha resaltado el "buen comportamiento" de la mayoría de los jóvenes de Canarias que "han sabido entender los límites de la diversión, facilitando con ello el desempeño" de los agentes.

Asimismo, ha citado la inmigración como otro de los desafíos a los que se ha enfrentado la Policía Nacional en los últimos meses, apuntando que el problema de la inmigración irregular en Canarias "requiere de una respuesta eficaz" por parte del cuerpo policial, que consideró se ha proporcionado.

"Hemos pasado momentos muy difíciles, extremadamente difíciles y ahí habéis estado, con proactividad y compromiso. Dando un paso adelante. Sigamos así, sin autocomplacencias ni relajaciones, con el afán puesto en la mejora continua, en nuestra lucha contra este interminable fenómeno donde las mafias ponen en riesgo la vida de miles de personas que arriban a nuestras costas buscando un mundo mejor", apostilló.

Expuso que la Policía Nacional ha puesto en marcha, realizando un "importante esfuerzo", nuevas instalaciones centradas en la mejora de la acogida de los inmigrantes.

Martínez concluyó su discurso haciendo mención a la frase del experto en materia de negocios Stephen Covey de que "lo más importante de la vida es que, lo más importante, sea lo más importante".