La modelo Nieves Álvarez y el abogado Manuel Broseta han puesto fin a su relación después de un año juntos, según ha informado este martes Semana.

Los principales motivos de la ruptura se deben a que el letrado viaja de manera rutinaria por cuestiones de trabajo, lo que en los últimos meses provocó que la ya expareja se distanciara, también, en el terreno sentimental. 

Por otro lado, según han informado fuentes cercanas a la modelo al mencionado medio de corazón, los dos han decidido quedarse con los momentos buenos que han vivido de la mano, acordando mantener, así, una relación de amistad.

El abogado, de 54 años, es propietario de uno del restaurante Alma Beach, uno de los más populares de Ibiza. Esto le obliga a vivir con un pie en la isla pitiusa y el otro en Valencia, donde viven sus dos hijos.

Broseta es el hijo del político asesinado por ETA en 1992 Manuel Broseta Pont. Se licenció en Derecho por la Universidad de Valencia y realizó varios cursos en Harvard. 

La también presentadora, de 47 años, fue fotografiada junto al letrado en junio del pasado año, cuando ambos compartían confidencias y gestos de cariño en una terraza. Las sospechas sobre su relación se confirmaron tras ser vistos paseando en la playa abrazados y sonrientes.

Nieves Álvarez y su marido, Marco Severini, anuncian su separación

La modelo empezó su relación con el valenciano después de cortar con Marco Severini. Su relación duró 20 años y estuvieron 12 de casados. Anunciaron su divorcio en 2015 ante los sucesivos rumores de ruptura.

"Es una decisión muy meditada por los dos y tomada de mutuo acuerdo. Entre ambos queda una relación de máximo respeto y amor, así como tres hijos maravillosos por los que siempre ambos velarán por el bien de los mismos, y por mantener su relación de cordialidad y cariño después de tantos años", explicaron a los medios por aquel entonces.