Ginés Jiménez, imputado por supuestas extorsiones y amenazas durante su etapa de jefe de Policía Local de Coslada, se ha propuesto no dejar títere con cabeza. Tras salir de la cárcel bajo fianza de 9.000 €, ha iniciado una campaña de ataque a sus enemigos para limpiar su imagen: "Me han puesto el sello de mafioso y no hay forma de quitármelo".
Este jueves convocó a los medios en un restaurante situado en la A-2. Allí anunció que se pondrá delante de las cámaras cada 15 días para ir desvelando datos "por capítulos" contra miembros de "la trama de políticos, sindicatos, policías locales y nacionales", según él montada para organizar su linchamiento.
Al alcalde socialista de Coslada, Ángel Viveros, lo llamó "inquisidor número uno". Al ex alcalde del PP, Raúl López, lo acusó de "prevaricar" para promocionar a un agente en la Policía Local. También dijo que la UDYCO de la Policía Nacional tiene un "odio obsesivo" hacia él. Y a una de las empresarias que lo denunció la llamó "mentirosa compulsiva". Su interés mediático le podría llevar incluso al cine: "Me ofrecieron hacer de capo en una película, pero lo rechacé porque no es mi papel".
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