Según el portavoz en el Consistorio, Daniel Gómez, "el COVID-19 ha traído consigo una enorme crisis económica y social, obligando al cierre de toda la actividad considerada no esencial, con sucesivas olas y provocando restricciones en la vida cotidiana de los ciudadanos y de los sectores productivos".

"A lo largo de la pandemia por la COVID-19 los negocios de nuestra localidad han hecho un importante esfuerzo para establecer medidas de protección y adaptarse a las medidas de manera escrupulosa y ahora son las administraciones las que debemos ser responsables y tomar decisiones que ayuden a nuestros negocios", ha agregado el portavoz socialista.

Ha aludido a que la administración central y autonómica han puesto en marcha diversas ayudas "pero hemos echado en falta que el consistorio campillero ponga sobre la mesa más medidas para ayudar a revitalizar el comercio local".

"Consideramos fundamental -ha indicado- la creación de una línea de ayudas económicas extraordinaria de apoyo al sector del comercio y la hostelería en nuestro municipio, contribuyendo a garantizar el mantenimiento de la actividad y el empleo, amortiguar la reducción drástica de los ingresos que llevan meses sufriendo y facilitar el cumplimiento de sus obligaciones empresariales".