La obras, entre las que destacan la electrificación, renovación de infraestructura y vía, la implantación de nuevas instalaciones de seguridad, control de tráfico y telecomunicaciones o la construcción del nuevo túnel de Oural; han sido presentadas este viernes en Monforte (Lugo) por la presidenta de la Adif, Isabel Pardo de Vera, acompañada en el acto por el presidente provincial y alcalde monfortino, José Tomé, y el secretario general de Infraestructuras, Sergio Vázquez.

La inversión prevista por la Adif es de 546,4 millones de euros durante el período 2021-2023, en el que se pretende mejorar la "fiabilidad y competitividad" de la línea por la inclusión del tramo Ourense-Monforte en el Corredor Atlántico de Mercancías y la llegada de la conexión de Lugo en la red de alta velocidad.

"Hemos sacado a esta provincia del rincón del olvido en el que llevaba unos años y hemos pasado del voy a hacer al hacemos", ha señalado Sergio Vázquez, quien ha resaltado que en "poco más de dos años casi se han triplicado" las inversiones en la provincia de Lugo "pasando de 132 entre 2006 y 2018 a 303 millones de euros entre 2018 y 2021".

Por su parte, Isabel Pardo de Vero ha apupntado el "factor de igualdad" y "cohesión territorial" que supone la movilidad que, para el Adif, "excede el acotado concepto del transporte de viajeros y bienes" y supone un elemento "transversal" para "el tejido productivo, el turismo, la cultura y el conocimiento".

Por último, el alcalde monfortino y presidente de la Diputación de Lugo, José Tomé, ha calificado de "histórica" la jornada para la provincia de Lugo, que "vuelve a estar en el mapa de la infraestructuras de Galicia y de España".

OBJETIVOS Y ACTUACIONES CONCRETAS

En concreto, el plan de actuaciones anunciado para los 117 kilómetros del corredor -que, a su vez, se divide en los tramos entre Lugo y Monforte (71 kilómetros) y Monforte y Ourense (46 kilómetros)- persigue modernizar la línea a través de, entre otras obras, la electrifiación de los tramos, que se realizará siguiendo criterios medioambientales y supondrá una reducción en los costes operativos, con lo que, según incide el Adif, se pretende dotar de más competitividad este transporte respecto a los trayectos por carretera.

Los más de 500 millones de euros de inversión se reparten entre los dos tramos, siendo el que une Monforte y Ourense el que más recibe, con 349 millones para financiar 51 actuaciones; mientras que las 20 actuaciones entre Lugo y Monforte ascienden a 202 millones de euros.

Así las cosas, las obras previstas son la adaptación de la electrificación en ambos tramos, la renovación de 104 puentes, 12 pasos superiores, nueve estaciones y 21 túneles -incluida la ejecución del nuevo tunel de Oural- o la renovación de la vía y otros elementos como el carril, las traviesas o el balasto.

También contempla la ampliación de dos vías de apartado (Monforte Puerto Seco y Os Peares), con lo que podrán circular trenes de 750 metros; y la supresión de 35 pasos a nivel. Para la eliminación de estos pasos -repartidos entre Ourense (2), Monforte de Lemos (5), Sarria (14) y Lugo (14)- está prevista una inversión de 30 millones de euros.

Asimismo, está planeada una nueva variante de trazado que de continuación a la de A Pobra de San Xiao (Lugo) en la que destaca la eliminación de 14 pasos a nivel y el incremento de la velocidad de paso de los trenes hasta los 160 kilómetros hora.

Por último, los tramos contarán con la instalación de sistemas de seguridad y control de tráfico (ASFA digital, señalización y enclavamientos) y telecomunicaciones.