Según ha informado este viernes el Instituto Armado en una nota de prensa, el pasado lunes, una patrulla de la Guardia Civil de Alcúdia acudió a un aviso de salto de alarma en un domicilio de Port d'Alcúdia y en el lugar halló a dos personas, una mujer y a un cerrajero, intentando abrir la puerta de acceso.

Tras varias comprobaciones resultó que la primera había contratado al profesional mostrándole un antiguo contrato ya caducado.

Según han explicado, en relación a estos mismos hechos, el pasado mes de febrero, el propietario de la vivienda había presentado una denuncia por la sustracción de todo el mobiliario de la casa por parte de su inquilina.

Igualmente había denunciado a la misma mujer a principio de estasemana, al ver anunciada su casa en varios conocidos portales de alquiler de viviendas sin su consentimiento.

Por todo esto, la Guardia Civil ha detenido a la mujer, queagredió a los agentes, y ha iniciado la investigación del hombre por abrir la puerta a sabiendas de que el contrato estaba caducado.