Los hechos ocurrieron el pasado miércoles, cuando la víctima recibió una llamada de una mujer que le preguntaba por el estado de su marido, y después de hablar unos minutos, le dijo que le enviaría a su casa unos enfermeros para hacerle una revisión médica.

A la víctima le pareció extraña la llamada y se dirigió a su farmacia para informarles, y desde la farmacia hicieron comprobaciones con el Centro de Atención Primaria (CAP) para saber si se estaban haciendo revisiones a domicilio y les confirmaron que no, y avisaron a los Mossos.

Agentes de los Mossos contactaron con la vecina de Cambrils para asesorarla y poder establecer un dispositivo para identificar a los supuestos enfermeros, y el pasado jueves, una patrulla observó cómo dos hombres, que llevaban un maletín, llamaban al portal de la víctima, y los agentes los identificaron y los llevaron a la comisaría.

Los sospechosos explicaron que trabajaban en una empresa de ósmosis y que habían ido a vender sus productos, pero los agentes comprobaron que llevaban dos aparatos que no tenían nada que ver con la ósmosis.

Los detenidos, con antecedentes policiales, quedaron en libertad después de declarar en comisaría, y deberán presentarse ante las autoridades judiciales cuando sean requeridos.