El programa de Ana Rosa ha enviado a uno de sus equipos a cubrir el desalojo de un edificio okupa en el barrio de San Andreu en Barcelona desde primera hora de la mañana. Al menos 100 activistas se han asentado en la calle para evitar que los Mossos d'Esquadra pudieran desalojar las instalaciones. 

La jornada ha estado marcada por varios momentos de tensión donde los activistas han intentado frenar a los agentes. Los Mossos d'Esquadra han tenido que instalar una escalera para sacar a las personas que estaban en el interior a través del balcón. Este edificio lleva siete años ocupado, donde según aseguran los vecinos entran y salen diferentes okupas. 

Al parecer, los activistas también se han enfrentado a los periodistas que estaban allí para cubrir la noticia y han agredido a un equipo de Telecinco. "Nos hemos alejado, Ana, para evitar insultos y escupitajos que hemos recibido desde primera hora de la mañana", ha explicado, Miquel Valls, reportero de AR. 

Insultos, amenazas y escupitajos

La presentadora, Ana Rosa Quintana, muy enfadada, ha explicado que en esta situación de pandemia "eso es un delito contra la salud pública" y ha recomendado a su equipo que se aleje lo máximo posible del grupo de activistas. "El escupitajo con la pandemia es un arma", ha añadido. 

Cuando parecía que se habían calmado los ánimos ha llegado el momento más tenso de la jornada, uno de los activistas ha empezado a lanzar naranjas hacia el equipo de AR que ha tenido que alejarse y ponerse a cubierto. "¡Cuidado Miquel, que te están lanzando... Estos son muy animales!".

El equipo ha sido perseguido y agredido por uno de los manifestantes

El reportero estaba informando de lo sucedido cuando varios manifestantes se han acercado hasta ellos y han empezado a perseguirles. "¡Lárgate, venga, chao, ándale, vete...!, les ha gritado uno de los agresores. "Esto es una agresión, yo no sé dónde están los Mossos, pero deberían estar ahí también deteniendo a este individuo", comentaba Ana Rosa desde plató. 

El equipo se ha situado en una calle colindante, pero los agresores no han cesado en su persecución y cuando Miquel Valls estaba distraído le han golpeado con una naranja. "Ay, qué susto me ha dado... ¡Qué ya nos vamos!", ha gritado asustado el periodista. "¡Qué vergüenza!", comentaba incrédula la presentadora. Finamente, el equipo de Mediaset ha abandonado el lugar del desalojo para evitar problemas mayores.