La Comunidad de Madrid trata de reponerse al paso de la borrasca Filomena con todos los medios disponibles. Uno de los frentes más prioritarios es verificar el estado de los centros educativos de la región, a los que los estudiantes madrileños tendrán que volver el próximo lunes 18 de enero.

Tuberías congeladas, nieve y árboles caídos en las calles, resbalones... la difícil vuelta a la normalidad en Madrid

El Gobierno regional prorrogó esta semana la suspensión de las clases presenciales hasta el citado día porque la gran cantidad de nieve acumulada, el hielo y, en muchos casos, la caída de árboles en recreos y jardines y el colapso de algunos tejados hacía imposible la vuelta al cole este miércoles, como estaba previsto.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el vicepresidente de la Comunidad, Ignacio Aguado, ha asegurado que el objetivo que se han marcado es que todos los alumnos puedan volver a sus clases el lunes, aunque ha reconocido que en algunos casos ese retorno se puede retrasar por la existencia de desperfectos que no hayan podido ser solventados en estos días. 

Se han detectado daños en más de 240 instalaciones docentes, ha agregado Aguado, por lo que ha apuntado que es "posible" que algún centro no pueda abrir, pero sí ha confiado en que lo haga la mayoría de ellos.

Desde este miércoles, las clases se imparten online de forma generalizada. De acuerdo con los datos facilitados por la Consejería de Educación, este martes recibieron sus lecciones por internet más de 141.000 alumnos gracias a más de 16.000 docentes que se conectaron a la plataforma. Se espera que ambos índices hayan crecido cuando se faciliten los datos de esta jornada lectiva atípica por los efectos del temporal.