Al Grano: tú pones la casa, ellos un buen arroz

Encontrar buenos arroces en Barcelona es una de esas misiones aparentemente fáciles. Hasta que uno se pone a ello y descubre que es más fácil dar con paellas y arroces mediocres que con buenos platos.

Pues tenemos una buena noticia para quienes tienen su particular mapa con los mejores arroces de la ciudad: ahora no hace falta salir de casa para disfrutar de unos realmente ricos.

De cocinarlos y traerlos -también puedes pasar tú a recogerlos- se encargan en el restaurante Teleferic, que recientemente ha lanzado Al Grano, su servicio de arroces a domicilio.

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Su carta compuesta por una decena de arroces va desde los clásicos (arroz negro, fideua marinera, arroz del senyoret...) hasta propuestas más atrevidas, como el arroz con pies de cerdo y gamba roja, uno de cordero y sobrasada realmente delicioso o uno vegetal con berenjena ahumada y alcachofa.

Arroces sabrosos, en el mejor sentido del término, no de esos con fondos tan potentes que requieren un par de litros de agua por la tarde para aplacar la sed. Llegan en su punto, listo para comer. Pero si se nos enfría no pasa nada porque aguanta bien un rápido recalentado en el horno (precalentarlo a 180 o 200 grados, apagarlo y meter entonces unos minutos el arroz) sin que se pase.

Disponibles en ración individual (sobre los 20 euros, pero generosa) o doble (36 euros), la oferta se completa con algunas tapas clásicas del Teleferic, como su pulpo, croquetas o, si se quiere algo más contundente, unos canelones.

¿Y qué hago con la paellera? Buena pregunta. En el precio del arroz va incluido el recipiente y las instrucciones para poder limpiarla y seguir usándola en casa. Que nunca viene mal tener una buena paella.

Si ya tenemos, no hay sitio en la cocina o sencillamente queremos abonarnos a los arroces de Al Grano y no pensamos volver a cocinar un arroz nunca, también podemos pasar por el local y nos devolverán dos euros por paella.