La activista saharaui Aminatu Haidar, que este miércoles denunció que Marruecos le impidió viajar de El Aaiún a Las Palmas, había dado positivo en COVID-19 en un test PCR, según aseguró este mismo miércoles la compañía nacional Royal Air Maroc (RAM), en un comunicado difundido por la agencia oficial marroquí, MAP.

De acuerdo con esta versión, por tanto, el motivo de la prohibición de su viaje no fue que careciese del test PCR, sino que un test de ese tipo le había sido realizado horas antes y había dado positivo al virus.

"La compañía fue advertida por las autoridades sanitarias de El Aaiún de que la pasajera en cuestión había dado positivo", ante lo que la RAM impidió su acceso al avión, el vuelo AT1418 desde El Aaiún a Las Palmas, "por riesgo de que contagiase a la totalidad de los pasajeros", indica el comunicado.

La aerolínea añade que "esta coordinación entre las autoridades sanitarias, las autoridades locales y la Compañía Nacional tiene como objetivo proteger la salud de los pasajeros y la seguridad de los vuelos".

"De acuerdo con los procedimientos de Royal Air Maroc y de los de casi todas las aerolíneas, las personas positivas en COVID-19 no pueden, lógicamente, acceder a un vuelo, ya que se corre el riesgo de infectar a todos los pasajeros", agrega, indicando asimismo que "es útil recordar que cualquier persona infectada con COVID-19 debe observar un confinamiento estricto durante 14 días y evitar todo contacto con otras personas".

La versión de Haidar

En declaraciones a Efe, sin embargo, la activista dijo que ella había sido la única pasajera a la que se exigió un test PCR, y que nadie le había informado de que ese test fuera necesario hasta el momento de subir al avión.

En los medios marroquíes se filtró este miércoles por la tarde una copia del test PCR que supuestamente se practicó a Haidar, realizado en un "Laboratorio Kamar", y que dio positivo con fecha del 12 de noviembre.

El hijo de Haidar, que la acompañaba, sí pudo viajar por disponer de nacionalidad española.

Haidar, una de las independentistas históricas en el interior del Sáhara Occidental, acaba de fundar una asociación llamada Instancia Saharaui contra la Ocupación Marroquí, considerada entre las más combativas del independentismo.