La Guardia Urbana de Barcelona y los Mossos d'Esquadra han puesto 1097 denuncias y han desalojado a 4644 personas de 115 espacios de la capital catalana durante el fin de semana por incumplir las medidas anticovid. 

El teniente de alcalde de seguridad, Albert Batlle, ha detallado en una entrevista en TV3 que se han puesto 399 denuncias por no llevar mascarilla, 46 por incumplir la limitación de personas, 113 por el consumo compartido de alcohol y 539 por el incumplimiento de las restricciones nocturnas. 

En cuanto a las protestas del fin de semana Batlle ha dicho que "se mezclan grupos antisistema y negacionistas, la violencia y la inconsciencia" y ha hecho un llamamiento "a la responsabilidad de la ciudadanía para aislar a los violentos".

Batlle ha explicado que la Guardia Urbana estaba preparada para reaccionar a los disturbios de las manifestaciones del viernes y el sábado porque "desgraciadamente no es la primera vez". No obstante, ha reconocido que les sorprendió " el grado de violencia".

El perfil de las personas que protagonizaron los disturbios es "una mezcla muy heterogénea", ha dicho Btlle, que ha expuesto que los hechos todavía se están investigando a través del análisis de las imágenes. "Hay un efecto mimético en otras ciudades y países, y gente que se apunta a estos festivales cuando se producen", ha explicado en cuanto a las personas que entraron en establecimientos.

Ante la irrupción de la manifestación en la plaza San Mique,l los agentes de la Guardia Urbana se retiraron dentro de los edificios. Ha explicado que había una "situación de desproporción" y se optó por "evitar una entrada dentro de las dependencias municipales". "Nos preocupa que por primera vez se ha intentado hacer una acción en la plaza San Miquel, hasta el sábado no había pasado", ha apuntado.

En cuanto al primer fin de semana con restricciones de movilidad en Cataluña, el teniente de alcalde ha dicho que la situación es "muy complicada" y no ha descartado que los próximos días pueda haber medidas "más restrictivas" ante "un uso abusivo e indebido" de los espacios por parte de algunos ciudadanos. También ha agradecido el "comportamiento cívico general" de la ciudadanía.

Los Mossos han impuesto 1.864 denuncias en toda Cataluña

Los Mossos d'Esquadra han identificado a 4.062 personas y vehículos en el primer fin de semana de cierre municipal en Cataluña y han levantado 1.864 actas de denuncia por saltarse las restricciones de movilidad, el toque de queda nocturno, no llevar mascarilla o reunirse con más de seis personas.

Así lo han anunciado en rueda de prensa el conseller de Interior, Miquel Sàmper, y el comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Eduard Sallent, que han indicado que están estudiando si algunas familias han optado por instalarse en segundas residencias porque el jueves -ultimo día antes del cierre del perímetro municipal- repuntó la circulación viaria en las salidas de Barcelona entre un 12 y un 23 %.

Sallent ha detallado que a lo largo del fin de semana, desde que el pasado viernes empezó el cierre perimetral de los municipios, los Mossos han practicado un total de 4.062 identificaciones -3.121 a personas y el resto a vehículos-, a razón de unas mil personas al día.

El sábado y el domingo se hicieron más identificaciones que el viernes, ya que era un día laboral en que los ciudadanos se podían desplazar a otros municipios a trabajar y a llevar a los hijos al colegio, entre otras excepciones.

Además, en estos tres días los Mossos han efectuado 2.112 intervenciones en la vía pública y han levantado 1.864 actas de denuncia en relación a la movilidad y el toque de queda nocturno impuestos para rebajar el contagio del coronavirus.

Otros motivos por los que se han levantado algunas de estas actas durante el fin de semana han sido no llevar mascarilla o por mantener reuniones de más de seis personas.

Según Sallent, los Mossos también han cerrado este fin de semana doce locales que permanecían abiertos sin permiso.

Coincidiendo con la fiesta de la castañada, los Mossos detectaron alguna celebración con hasta 25 personas el sábado por la noche, en que se había cobrado entrada.

Por su parte, la circulación por los peajes de salida de Barcelona cayó el viernes hasta entre un 46 % y un 40 %, mientras que el sábado el descenso fue de entre el 73 % y el 83 %, según los datos de paso por los principales peajes en el área de Barcelona que ha dado a conocer Sàmper.

Por este motivo, el conseller ha agradecido a la ciudadanía el "cumplimiento masivo" de las restricciones: "sabemos que las medidas son difíciles de entender y que hay muchas excepciones. Entendemos el desánimo, el enfado y la frustración, son vidas alteradas, de restricciones, pero hay que hablar claro, nos quedan meses de dificultades".

Según el conseller, la gran mayoría de los ciudadanos cumplen con las restricciones, se adapta y las acepta como una herramienta "incómoda y eficaz".

El objetivo del Govern, ha indicado el conseller, es que la ciudadanía sea partícipe de todas las restricciones por "convencimiento" y no para evitar la sanción, ya que las autoridades sanitarias son las que marcan el camino con unas medidas "indispensables".