El pasado miércoles, el agricultor Gonzalo Crespo descubría una leona íbera en excelente estado de conservación y situada, por las primeras dataciones, en el siglo VI antes de Cristo, mientras realizaba "faena entre los olivos" de su terreno en la localidad cordobesa de San Sebastián de los Ballesteros, según el Día de Córdoba.

"Pasé y noté que el tractor se había encontrado un obstáculo, pero estas máquinas modernas están preparadas para no romper. Continué y cuando me di la vuelta, lo vi", relata. Así el agricultor hallaba, durante una jornada rutinaria en la finca de Cañablanquilla, la pieza arqueológica, que yacía semienterrada de costado, adormecida durante siglos bajo el suelo fértil de la campiña.

Los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil llegaron poco más tarde y se realizaron las pertinentes labores de recuperación con la asistencia de técnicos de la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía. No hizo falta precintar la zona, pues el punto concreto no ha sido desvelado para evitar a los merodeadores. 

"Los arqueólogos están flipando", añade Crespo. Pues, aunque en el municipio existen vestigios de la época romana documentados, es la primera vez que se producen hallazgos arqueológicos de esta envergadura.

Por el momento, la pieza ha sido trasladada al Museo Arqueológico de Córdoba para ser sometida a una limpieza y estudio completo, como ha explicado el alcalde de la localidad, Francisco Javier Maestre.