La policía catalana ha informado este martes en un comunicado de que la investigación se inició el 15 de septiembre, cuando los Mossos tuvieron conocimiento que se habían producido hurtos en dos establecimientos comerciales de la provincia de Barcelona y Tarragona donde los autores se habían desplazado con un vehículo robado el 13 de septiembre en Calafell (Tarragona), y el importe de los robos superaba los 2.000 euros.

Siempre actuaban de la misma manera: cargaban el carro de la compra con el máximo de productos de valor y salían por la puerta de emergencia donde les esperaba uno de los miembros dentro de un vehículo robado para huir con la mercancía.

El mismo día cometieron otro hurto, por valor de unos 1.000 euros, en otro establecimiento de Tarragona y una estafa en una gasolinera de Valls (Tarragona), y el día siguiente cometieron dos hurtos en dos tiendas de Roda de Berà y Tarragona donde robaron objetos por valor de unos 3.500 euros.

El 26 de septiembre robaron un vehículo estacionado en Roda de Berà y el 1 de octubre cometieron un robo violento en un supermercado del mismo municipio, donde un integrante del grupo arañó y retorció el brazo de una trabajadora para salir del supermercado, lo que le provocó un esguince.

Los Mossos detuvieron el 15 de octubre al principal responsable de los diferentes robos, realizaron dos entradas en Roda de Berà y localizaron una plantación con 150 plantas de marihuana y objetos de los robos anteriores.

La investigación continua abierta y el detenido, con numerosos antecedentes policiales, pasó el sábado a disposición judicial del juzgado en funciones de guardia del Vendrell (Tarragona), que decretó su ingreso en prisión.